Estudio: 3.760 toneladas de plástico cubren el mar Mediterráneo

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ARCHIVO - Residuos de plástico en una playa al norte de Beirut, arrojados a la orilla por fuertes vientos provenientes del Mediterráneo. Foto: Marwan Naamani/dpa
ARCHIVO - Residuos de plástico en una playa al norte de Beirut, arrojados a la orilla por fuertes vientos provenientes del Mediterráneo. Foto: Marwan Naamani/dpa

En la superficie del mar Mediterráneo flotan actualmente unas 3.760 toneladas de plástico, una "cantidad impactante", según describen los científicos del Centro Helénico de Investigación Marina (HCMR), en Grecia, los hallazgos presentados en la revista científica "Frontiers in Marine Science".

Los investigadores destacan que además del plástico flotante, que incluye bolsas de compra, botellas de agua, espuma de poliestireno y micropartículas, hallaron una cantidad importante de material plástico en el fondo del mar.

Según el equipo dirigido por Kostas Tsiaras, del HCMR, el mar Mediterráneo es un punto caliente de contaminación por plásticos porque muchos tramos costeros están densamente poblados.

A ello se suman factores como el turismo, la pesca y la navegación, pero también influye la composición geográfica, debido a que el intercambio de agua entre el mar Mediterráneo y el Atlántico es comparativamente bajo.

Un nuevo modelo de cálculo determinó que cada año acaban en el Mediterráneo unas 17.600 toneladas de plástico. De esa cantidad, 3.760 toneladas flotan actualmente en la superficie. En tanto, alrededor de 2.800 toneladas (16 por ciento) se hunden parcialmente en el fondo marino, mientras que el resto (84 por ciento) es arrastrado a las playas.

Los científicos calculan que hay más de 250.000 toneladas de residuos plásticos flotando en los océanos de todo el mundo.

"Los métodos de simulación de cómo se distribuye el plástico en el océano se caracterizan actualmente por un alto grado de imprecisión", explicó Tsiaras. Esto se debe principalmente a la complejidad de los procesos.

Mientras que las bolsas de polietileno, por ejemplo, flotan en la superficie durante mucho tiempo, otros residuos plásticos se hunden rápidamente. Algunos son absorbidas por organismos marinos o se desintegran en pequeños trozos. Además, el viento, las olas y las corrientes impulsan el plástico a grandes distancias.

Al tomar en cuenta todos estos factores, los investigadores del centro helénico lograron identificar las regiones en las que una cantidad especialmente grande de plástico acaba en el mar.

Tsiaras destaca que el nuevo modelo de cálculo podría ayudar a examinar la utilidad de las medidas que se implementan para frenar la contaminación y en todo caso desarrollar y aplicar medidas más específicas.

dpa