Congreso de Guatemala elige nueva junta directiva

CIUDAD GUATEMALA (AP) — En medio de señalamientos de componendas y sobornos, el Congreso guatemalteco eligió a su nueva Junta Directiva, en la que diputados votaron por una planilla de oficialistas y aliados para que dirijan el legislativo durante el próximo año.

El Congreso guatemalteco tiene pendientes desde hace dos años cambios importantes para la justicia, seguridad y la sociedad, por ejemplo, la elección y cambio de magistrados de cortes que han sido cuestionados, señalados o acusados de corrupción y que aún se mantienen en sus puestos. Mientras, los magistrados han librado de acusaciones a varios diputados.

Con 108 votos, de 160 diputados, los oficialistas y aliados eligieron como presidenta a Shirley Joanna Rivera Zaldaña, diputada electa por el partido oficial VAMOS. A cinco minutos de su elección la diputada tomó la palabra y agradeció a Dios por su elección leyendo un versículo de la Biblia sobre el respeto a la autoridad.

Varios legisladores opositores habían denunciado la víspera que el oficialismo había pactado con sobornos y prebendas la elección de la nueva Junta Directiva.

El diputado opositor Orlando Blanco dijo en el pleno que “cuando los políticos hablamos de Dios es para manipular (la opinión de la gente)".

Blanco dijo que la elección fue una componenda entre tres personas: el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei, la política y líder del partido VALOR Zury Ríos Sosa —hija del exdictador acusado de genocidio Efraín Ríos Montt— y Sandra Torres, exlíder del partido UNE, que estuvo presa por corrupción acusada de haber ocultado más de 3 millones de dólares de financiamiento electoral a ese partido.

“Los acuerdos políticos no son malos per se, pero sí las componendas que en este caso tiene un nombre" dijo Blanco y agregó que el presidente Giammattei, Zury Ríos y Sandra Torres —“esa alianza criminal”— es la responsable de esa mayoría relativa que habría votado por la nueva junta directiva.

La diputada Evelyn Morataya dijo en el pleno que el gobierno actual le tiene miedo a la democracia y a la independencia de poderes. “Se debe vencer no solo con el poder, sino con decencia y decencia es lo que más le ha faltado a este congreso”, dijo.

La semana pasada el Tribunal Supremo Electoral ordenó que se le regresara a Sandra Torres la dirección del partido UNE, que le había sido retirada por sus problemas legales, a pesar de que un grupo de diputados disidentes pidieron rectificar en forma exprés les fue negado.

El lunes el diputado Jorge Estuardo Vargas Morales, anunció que será el nuevo jefe de la bancada con el apoyo de 32 de 52 diputados electos por ese partido.

Vargas Morales fue designado en julio pasado por el Departamento de Estado estadounidense como un actor antidemocrático y corrupto señalándolo de participar en “hechos significativos de corrupción y actuó para debilitar instituciones o procesos democráticos al participar en sobornos, coerción y tráfico de influencias”, y también le retiró la visa de entrada a ese país.