El abogado principal de la líder birmana Aung San Suu Kyi, derrocada por el ejército en febrero, anunció este viernes que ha recibido una orden de la junta para no hablar más con periodistas, diplomáticos u organizaciones internacionales.
"Vaya, vaya, han cerrado mi boca con el 144", en referencia al número del artículo del código criminal que usaron para acallarlo, escribió el abogado Khin Maung Zaw en su página de Facebook.
El letrado también cuelga imágenes de la orden, donde las autoridades subrayan que ha estado hablando con los medios.
"Esta comunicación perturba y hiere a algunas personas que están actuando en línea con el derecho, y podría causar agitación social", se lee en la orden.
"A partir del 14 de octubre, se le prohíbe al abogado Khin Maung Zaw comunicarse, reunirse o hablar con prensa local o extranjera, diplomáticos extranjeros, organizaciones internacionales (...) representantes de gobiernos extranjeros y otras organizaciones en el extranjero de forma directa o indirecta", continúa.
Esta orden llega después de que el abogado explicara la experiencia del depuesto presidente Win Myint, quien habría rechazado la oferta de los militares para renunciar al cargo durante el golpe del 1 de febrero.
La líder Aung San Suu Kyi se enfrenta a un amplio abanico de cargos que pueden acarrearle largas penas de cárcel.
Los medios no pueden seguir los juicios y sus abogados son una fuente de información crucial sobre las audiencias.
El golpe de febrero desencadenó un amplio movimiento de protesta que los militares reprimieron ferozmente, con casi 1.200 civiles muertos.
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