Francia censura "duplicidad" en acuerdo de submarinos

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PARÍS (AP) — El ministro del Exterior de Francia censuró el sábado lo que describió como la “duplicidad, arrogancia y mentiras” en torno a la ruptura súbita de un contrato lucrativo con el país para fabricar submarinos a Australia a favor de un acuerdo con Estados Unidos y declaró que una crisis está en puerta entre los aliados occidentales.

Un día después de que Francia retirara a sus embajadores en Estados Unidos y Australia, el ministro del Exterior francés Jean-Yves Le Drian arremetió contra lo que dejó entrever fue un acuerdo secreto en que se traicionó a Francia.

Retirar a los embajadores “implica la fuerza de la crisis actual” del gobierno francés con Washington y Canberra, declaró el canciller en una entrevista con el canal televisivo Francia 2. Señaló que era la primera vez en la historia que Francia, el aliado estadounidense más antiguo, retiraba a su embajador de Estados Unidos.

Francia enfureció tras el anuncio del presidente Joe Biden sobre el acuerdo, al lado de los gobernantes de Australia y Gran Bretaña, para entregar al menos ocho submarinos nucleares a Canberra. Francia había firmado un contrato en 2016 para una docena de submarinos convencionales diésel-eléctricos y los trabajos para fabricarlos ya estaban en marcha. El acuerdo con el Grupo Naval, de propiedad estatal y mayoría francesa, alcanzaba un valor de al menos 66.000 millones de dólares.

Las sutilezas diplomáticas han comenzado a desaparecer a medida que las autoridades francesas buscan hacer patente su molestia.

Le Drian rechazó los reportes de que hubo consultas de antemano con Francia antes del anuncio y señaló que “eso no es verdad”.

Los aliados “no se tratan unos a otros con tal brutalidad, tal imprevisibilidad, a un socio importante como Francia… Así que existe en verdad una crisis”, agregó.

“Tenemos razones para cuestionar la fortaleza de nuestra alianza”, apuntó.

Antes, el embajador de Francia en Australia también se apartó del lenguaje diplomático frente a lo que fue descrito ampliamente en Francia como el “contrato del siglo”.