La multinacional alemana Audi es el primer fabricante de automóviles que utiliza datos de enjambre de alta precisión para alertar a los conductores de eventuales peligros, por ejemplo, de hielo en la carretera. Audi informó que la aplicación patentada puede detectar el más mínimo cambio en la adherencia de las ruedas de un coche a la superficie de la carretera, subir los datos a la nube para su procesamiento y advertir a los conductores, en tiempo más o menos real, de la presencia de hielo u otras condiciones resbaladizas. La función es una actualización del sistema Información de peligro local (LHI) de Audi, basado en la tecnología "Car-to-X". Desde 2017, esta permite a los modelos de Audi intercambiar información sobre accidentes, vehículos averiados, atascos o visibilidad limitada. Los datos de enjambre son un complemento clave del sistema, ya que cuanto mayor es el número de vehículos que aportan los datos, más fácil es para el sistema aprender, analizar y crear mapas para informar o advertir a los conductores en función de la situación. El "cerebro" del sistema de alerta utiliza datos agregados de muchos vehículos que, una vez agrupados, se combinan con metadatos, tales como registros meteorológicos actuales e históricos. Esta información se transmite a través de una nube gestionada por la empresa sueca NIRA Dynamics AB a un proveedor de servicios. Allí, los datos se integran en una plataforma donde la red de carreteras se representa como un modelo tridimensional preciso. dpa