Cultivadores de coca rechazan regreso de fumigación aérea contra narcocultivos en Colombia

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La principal asociación de campesinos cocaleros de Colombia rechazó este martes el plan del gobierno para reanudar fumigaciones aéreas de cultivos ilícitos, y convocó a movilizaciones en su contra, sin precisar bajo qué forma o en qué fecha se realizarán.

"Manifestamos nuestro rechazo al decreto", firmado el lunes, "por el cual se reanuda el programa de aspersiones aéreas con glifosato en los territorios como herramienta privilegiada de la política antidrogas del gobierno", indicó la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana (Coccam) en un comunicado.

La organización, que impulsó marchas masivas contra la erradicación forzada hace cuatro años, convocó a las organizaciones sociales "a pronunciarse y movilizarse", pues considera que la aspersión aérea viola lo pactado en los acuerdos de 2016 con la guerrilla FARC, donde se privilegia la sustitución de cultivos ilícitos por otros legales.

"No entendemos porqué el gobierno nacional insiste en hacer trizas el acuerdo de paz y pisotear la confianza de las comunidades", cuando "el 98% de las familias inscritas" en el programa de sustitución de cultivos ilícitos "han cumplido lo pactado", agregó Coccam.

La aspersión con glifosato fue suspendida en Colombia, mayor productor de cocaína en el mundo, en 2015 bajo el gobierno de Juan Manuel Santos, ante la sospecha de que puede provocar daños a la salud y el medioambiente.

Pero su sucesor, Iván Duque, ha insistido en retomar el método que considera más efectivo para erradicar los narcocultivos que alcanzaron 154.000 hectáreas en 2019 en el país, según la ONU.

El lunes, el ministro de Defensa, Diego Molano, anunció un decreto que regula los riesgos para la salud y el medioambiente. La aspersión solo se podrá realizar "en zonas de cultivo extensivos, industriales y donde haya presencia fuerte de grupos armados", precisó en W Radio.

Adicionalmente, el documento prevé consultar a las comunidades negras e indígenas que se encuentren en territorios afectados y realizar verificaciones periódicas de posibles daños causados a la salud y el medioambiente por el herbicida, calificado de "posiblemente" cancerígeno por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Sin embargo, antes de poder reanudar las aspersiones aéreas, el gobierno deberá obtener antes el visto bueno del Consejo Nacional de Estupefacientes (CNE), que suspendió la fumigación de cultivos ilícitos con glifosato por pedido de la justicia.

El anuncio interviene en medio de un grave repunte de la violencia en el país, que Duque atribuye a grupos que se financian del narcotráfico y la minería ilegal en zonas remotas.

Tras casi cinco décadas de combate al narcotráfico, Colombia, envuelta en un conflicto armado, sigue siendo el mayor productor de cocaína en el mundo y Estados Unidos su principal consumidor.

dl/yo