Cifras fiscales de Colombia generan dudas y elevan riesgo de perder grado de inversión

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Foto de archivo. El ministro de Hacienda de Colombia, Alberto Carrasquila, atiende a los periodistas durante una conferencia de prensa en Bogotá. 10 de agosto, 2018. REUTERS/Carlos Julio Martínez
Foto de archivo. El ministro de Hacienda de Colombia, Alberto Carrasquila, atiende a los periodistas durante una conferencia de prensa en Bogotá. 10 de agosto, 2018. REUTERS/Carlos Julio Martínez

Por Nelson Bocanegra

BOGOTÁ, 8 mar (Reuters) - Un plan de Colombia para financiar sus necesidades de gasto para este año que esbozó perspectivas sobre su abultado nivel de deuda dejó importantes inquietudes en el mercado de capitales y aumentó el riesgo de que el país pierda el grado de inversión del que goza por parte de las agencias evaluadoras de riesgo.

El Ministerio de Hacienda revisó el jueves último su plan financiero 2021, en el que incrementó la meta de déficit fiscal del Gobierno Nacional Central a un 8,6% del PIB, desde una previa de 7,6% planteada en noviembre del año pasado, que además ya había sido elevada desde un objetivo original de 5,1% anunciado a mediados de 2020.

El nuevo pronóstico superó las expectativas de los analistas para quienes lo peor en materia de deuda había pasado en el 2020, año en el que el déficit fue un 7,8% del PIB debido al incremento del endeudamiento para atender la pandemia de coronavirus.

"La publicación del Plan financiero puede tener dos repercusiones, la inmediata es un incremento en la aversión al riesgo en el mercado de renta fija, con lo cual se puede acentuar el empinamiento que ha tenido lugar en las últimas semanas, y que hemos identificado como tendencia predominante en lo que queda del año", escribió Bancolombia en una nota.

Además, el plan financiero dejó preguntas en el aire, debido a que el Ministerio de Hacienda se abstuvo de revelar datos en detalle como cuánto emitirá en bonos externos y otros rubros que no quedaron claros para el mercado.

"La presión también se puede extender a los títulos en moneda extranjera, no solo porque aumentará la oferta de este tipo de papeles en el nuevo plan financiero, sino porque este anuncio llega en momentos de tensión en el mercado de Tesoros de Estados Unidos", agregó Bancolombia.

La reacción no se hizo esperar. El viernes los bonos colombianos denominados en dólares con vencimiento en 2029 y 2030 cayeron 1,2 centavos y 2 centavos, respectivamente, a su nivel más bajo en ocho meses, ante la incertidumbre sobre la salud financiera del Gobierno.

"Hay mucho misterio, deberían ser muy claros con los inversionistas sobre lo que (el ministerio) va a hacer, como creador de mercado nosotros estamos preocupados porque somos quienes le ponemos el pecho y hacemos presencia en pantalla comprando la deuda", dijo a Reuters una agente local que pidió la reserva de su nombre.

CUENTA REGRESIVA

Según cálculos del holding de inversiones Corficolombiana, en medio de la actual coyuntura los agentes locales podrían absorber hasta el 42% de las colocaciones de deuda interna de este año, lo que dejaría la mayor carga a los agentes extranjeros e incluso al Banco Central, por lo que se espera que las tasas de interés continuarán subiendo.

Uno de los datos que el Ministerio de Hacienda sí reveló y encendió las alarmas en el mercado, fue su proyección de que el nivel de deuda del país disminuiría de manera muy gradual desde el actual 64,8% del PIB a un 59,7% en 2031, algo que podría ser castigado por las principales evaluadoras de riesgo, que ya tienen la perspectiva de la calificación del país en negativa.

El PIB de Colombia terminó el año pasado en 275.000 millones de dólares.

"Más allá del tema de transparencia, en general el plan financiero aumenta la probabilidad de una baja de calificación y la pérdida del grado de inversión", dijo Camilo Pérez, economista jefe del Banco de Bogotá. "La duda es cuándo sería".

Para la correduría Credicorp Capital, la decisión se tomaría entre el cuarto trimestre de este año y el primer semestre de 2022.

Al deterioro en el panorama se suma la incertidumbre sobre el futuro de una regla fiscal que fue suspendida durante 2020 y 2021 para permitir al país elevar el déficit fiscal, pero que ahora los expertos vaticinan que tendría que permanecer inactiva los próximos dos años o incluso ser eliminada para seguir manteniendo un déficit fiscal alto.

"Esos números no son consistentes con el cumplimiento al pie de la letra de la regla fiscal a partir del 2022", dijo Andrés Pardo, jefe de estrategia para América Latina de XP Investments. "Esto implica que posiblemente el Gobierno va a pedir una extensión de la suspensión de la regla que puede ser no solamente para 2022 sino también para 2023".

A ello se sumó la incertidumbre en torno a una reforma tributaria que el Gobierno anunció desde el 2020 que tramitará en el Congreso en un año previo a las elecciones legislativas y presidenciales de 2022, que pondrá bajo fuego el golpeado capital político del actual mandatario, Iván Duque.

Pero incluso sobre el proyecto existen diferencias, debido a que el Ministerio de Hacienda dijo que buscaría recursos por el equivalente al 1,5% del PIB, menos de lo que había planteado el año pasado, de 2%, lo que alimentaría las dudas de las calificadoras de riesgo.

"Ya lograr el 1,5% del PIB es retador, se va a sumar el tema político, la situación actual económica y social en la peor crisis que ha tenido Colombia en 100 años en magnitud", advirtió Pardo de XP Investments. "En estas circunstancias va a ser muy difícil de lograr".

(Reporte de Nelson Bocanegra. Editado por Luis Jaime Acosta)