La Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF) anunció el miércoles que registró una pérdida neta de 3.000 millones de euros en 2020, debido al impacto de la pandemia del coronavirus.
El volumen de negocios del grupo estatal retrocedió de 14,6% el año pasado, en relación a 2019, pero la pérdida es menor a la esperada gracias a un drástico plan de ahorro.
Los beneficios obtenidos gracias al transporte en los trenes de gran velocidad, que genera gran parte de los beneficios de la SNCF en tiempo normal, se vio particularmente afectado, con una caída del tráfico de 48%.
"La movilidad internacional está detenida y el mercado francés está al ralentí", lamentó la dirección en un comunicado.
La SNCF ha tenido que volver a aumentar su deuda, que el Estado acababa de reducir en 25.000 millones el 1 de enero. Esta ascendía a 38.100 millones a fecha del 31 de diciembre.
La dirección cuenta ahora con una "reanudación gradual de la actividad (...) a partir del otoño, con pleno efecto en 2022".
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