Bolívar derrota 2-1 a Lanús en octavos de ida de la Sudamericana

Compartir
Compartir articulo

Bolívar se impuso 2-1 al argentino Lanús este miércoles en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana 2020 jugado en el estadio Hernando Siles de La Paz (3.850 m de altitud).

Marcos Riquelme de golpe de cabeza a los 45 minutos y Luis Haquin, a los 86, marcaron los goles para la 'Academia' paceña. Tomás Belmonte, a los 32, había puesto en ventaja al 'granate'.

El partido tuvo dos caras. La etapa inicial con el dominio absoluto aunque improductivo de Bolívar y un plantel argentino replegado. La segunda mitad presentó a un Lanús más ambicioso que adelantó líneas complicando la salida de los locales, que salieron más desordenados.

El partido de vuelta de esta llave se disputará el 2 de diciembre en Argentina.

El ganador enfrentará en los cuartos de final al vencedor de la llave entre Independiente de Argentina y Fénix de Uruguay.

- Dominio paceño -

Bolívar presionó desde el inicio del partido y se hizo dominador neto del lance con frecuentes incursiones sobre el arco visitante. A los 2 minutos, el lateral celeste Diego Bejarano sirvió sobre el área una pelota que se fue cerrando y puso en apuros al portero Lautaro Morales.

El partido era un monólogo y se jugaba enteramente sobre el terreno del plantel 'granate', cuya defensa cedió más de una decena de tiros de esquina en apenas 20 minutos de juego.

Los celestes no le daban tregua al rival cuya única opción eran los pelotazos que terminaban muriendo en la zaga boliviana.

Sin embargo, pese al dominio, el juego de la Academia boliviana no lograba concretar las numerosas oportunidades de gol generadas y conjuradas por Morales o por la tupida defensa argentina.

- Lección de eficiencia -

Cuando más atacaba Bolívar, la visita abrió el marcador. A los 32 minutos, Tomás Belmonte aprovechó la floja marca celeste para cabecear un magnífico centro servicio desde la derecha por Alexandro Bernabei. Una lección de pragmatismo porque era la primera incursión directa de Lanús.

Tras el gol, los granates ganaron en confianza, adelantaron filas y equilibraron las acciones con destellos de peligrosidad.

En la agonía del primer tiempo, Bolívar logró la igualdad mediante su goleador, el argentino Marcos Riquelme que a los 45 minutos remató de cabeza un tiro de esquina enviado por el capitán Juan Carlos Arce.

- Otra actitud -

La dinámica del partido cambió en el segundo tiempo. Lanús ingresó con una disposición más ambiciosa. Detectó las falencias de la zaga celeste y adelantó líneas para ejercer mayor presión sobre los locales, bloqueando sus salidas.

El estratega bolivarista Wálter Flores dispuso los ingresos del juvenil goleador Víctor Abregó y con Anderson Cruz con intención de convertirlos en factores desequilibrantes.

A medida que transcurría el lance, aumentaba el nerviosismo de los locales que carecían de la precisión necesaria para convertir. Las sociedades entre Arce, Saavedra y Riquelme estaban tan congeladas como la noche paceña.

El alma volvió al cuerpo de Bolívar a los 86 minutos con otro cabezazo 'milagroso', esta vez del defensor Luis Haquim.

En tiempo de descuento los locales marcaron otro tanto que, aunque validado inicialmente por el árbitro, terminó siendo anulado por el VAR que interpretó que el atacante celeste Vladimir Castellón había tocado el balón con el brazo.

En el epílogo mismo del lance, fue expulsado Leonel Di Placio por acumulación de tarjetas amarillas.

gbh/cl