El mundo no debe darle la espalda a Afganistán (ONU)

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La comunidad internacional debe continuar ayudando a Afganistán, que experimenta un aumento de la violencia y un estancamiento de las negociaciones de paz, afirmó este lunes el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), previo al inicio de una conferencia de donantes en Ginebra.

"El futuro de millones de afganos depende tanto del éxito de las negociaciones de paz como del compromiso de la comunidad internacional a favor del desarrollo del país", señaló Filippo Grandi, el alto comisionado, tras una visita de cinco días a ese país, de acuerdo con un comunicado de la ACNUR.

Grandi expresó su esperanza de que la conferencia de donantes, que se celebrará --en su mayor parte por videoconferencia-- a partir de este lunes, "sea la ocasión para manifestar este compromiso de manera concreta y duradera".

La conferencia debe determinar los objetivos comunes de desarrollo y los compromisos financieros para 2021 del gobierno afgano y la comunidad internacional.

Grandi subrayó la necesidad urgente de concluir las negociaciones de paz entre el gobierno afgano y los talibanes, que combaten para derrocarlo y así recuperar el poder del que fueron echados en 2001 por una coalición internacional liderada por Estados Unidos.

Estas conversaciones se encuentran estancadas, y la retirada de parte de las fuerzas estadounidenses anunciada durante la semana anterior por la administración de Donald Trump debilita aún más al gobierno de Kabul.

Tal acuerdo "es esencial para poner fin al conflicto que no solamente destruye vidas sino que continúa siendo la principal causa de desplazamientos forzados (en el interior del país y hacia naciones limtírofes)", destaca el comunicado de la ACNUR, que precisa muy en particular que un acuerdo de paz debe garantizar "realmente la seguridad, el bienestar y los derechos de todas las mujeres y los hombres de Afganistán".

Uno de los principales temores ante un posible retorno de los talibanes al poder es que de restablecerse su régimen negarían prácticamente todos los derechos a las mujeres afganas.

Grandi instó al fin inmediato de la violencia, que sigue en aumento.

Una salva de cohetes lanzada el sábado contra el centro de la capital afgana provocó 10 muertos y 51 heridos. El ataque fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), coincidiendo con la visita del alto comisionado.

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