Una empresa china, primera en exportar crudo de Libia tras siete meses de bloqueo

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EPA/ALEX HOFFORD/Archivo
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Trípoli, 25 sep (EFE).- La compañía Unipec, filial de la petrolera china Sinopec, fue la primera en reanudar hoy la exportación de crudo desde el golfo de Sirte, más de siete meses después de que milicias armadas bajo el mando del mariscal Jalifa Hafter, tutor del Ejecutivo no reconocido en el este y hombre fuerte del país, bloquearan la industria petrolera en Libia.
Según los registros de tráfico marítimo, el buque "Delta Hellas", con bandera griega y una capacidad de almacenaje de un millón de barriles de crudo, partió poco después del amanecer de este viernes desde el puerto libio de Hariga tras completar las labores de carga.
El petrolero, que salió rumbo a Port Said, la ciudad egipcia que da acceso al canal de Suez, es el primero que se hace a la mar desde que la semana pasada Hafter y Ahmed Maiteeg, vicepresidente del rival Gobierno de Acuerdo Nacional sostenido por la ONU en Trípoli (GNA), pactaran la reapertura de tres de las principales terminales petroleras en el disputado golfo de Sirte.
Hacia Hariga se dirige igualmente el petrolero Marlin Shikoku, también alquilado por Unipec y con bandera de Singapur, que según los datos de tráfico marítimo podría llegar en las próximas horas para iniciar unas labores de carga que suelen durar tres días.
Además del puerto de Hariga, las autoridades libias han anunciado la reapertura de las terminales de Brega y Zuweita, que podría retomar su actividad el próximo domingo.
PACTO PARA REPARTIR LOS BENEFICIOS
Aunque se desconocen los detalles, el acuerdo se produjo después de que Hafter y Maiteeg admitieran repartir los beneficios, una vieja reivindicación del Ejecutivo no reconocido en el este.
Según el director de la Compañía Nacional libia de Petróleo (NOC), vinculada al gobierno de Trípoli, Mustafa Sanallah, el desbloqueo permitirá que la producción se eleve hasta alcanzar los 260.000 barriles diarios de crudo la próxima semana, "siempre que se mantenga la tranquilidad y la seguridad" en el citado golfo, corazón de la industria petrolera libia.
Una cantidad muy alejada aún de los cerca de 1,8 millones de barriles diarios de crudo que producía Libia antes de que la OTAN contribuyera en 2011 a la victoria de los heterogéneos grupos rebeldes sobre la dictadura de Muamar al Gadafi.
El acuerdo, con el que la NOC espera llegar a los 400.000 barriles diarios en diciembre, se considera muy frágil, ya que no ha sido aceptado por las fuerzas y grupos armados vinculado al propio Gobierno en Trípoli, que al igual que las tropas de Hafter siguen reforzando su posición en la línea del frente, que divide en dos al país a través del eje que une la ciudad costera de Sirte y el oasis del Al Jufrah.
El bloqueo militar, sumado a cinco años ininterrumpidos de guerra civil que ha destruido las infraestructuras, causan cortes diarios de suministro eléctrico, además de escasez de gas ciudad y otros combustibles, que han desencadenado protestas en todo el país, la última de ellas el lunes en la ciudad de Benghasi, capital del este de Libia.
Manifestaciones que han sido reprimidas con extrema violencia por ambas gobiernos, a los que han denunciado diversas organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos.
Según la NOC, los más de siete meses de bloqueo petrolero han causado a la industria libia perdidas por valor de casi 9.000 millones de euros.