Aeroméxico se acoge a capítulo 11 de ley de bancarrota en EE.UU.

Compartir
Compartir articulo

(Bloomberg) -- Grupo Aeroméxico SAB, la segunda aerolínea de mayor tamaño de México, se acogió al capítulo 11 de la ley de bancarrota de EE.UU., sumándose a una serie de aerolíneas latinoamericanas que han solicitado la protección judicial ante la grave crisis del sector de los viajes causada por la pandemia de covid-19.

Con el proceso del Capítulo 11, la operadora “espera fortalecer nuestra posición financiera e incrementar nuestra liquidez”, afirmó en un comunicado emitido el martes a la bolsa mexicana. Aeroméxico dijo que su objetivo es “utilizar el proceso del Capítulo 11 para fortalecer su posición financiera e implementar los ajustes operativos necesarios para hacer frente al impacto del COVID-19 y crear una plataforma sustentable para el futuro”.

El volumen de pasajeros de Aeroméxico se desplomó más del 90% a medida que los Gobiernos suspendían los vuelos y los viajeros se quedaban en casa. La aerolínea llegó a acuerdos con grupos laborales y proveedores en mayo para reducir los costos en más de la mitad, a alrededor de US$50 millones al mes, y ofreció a sus empleados vacaciones no remuneradas.

Las aerolíneas latinoamericanas, a diferencia de las operadoras en EE.UU. y Europa, han recibido escaso apoyo de los Gobiernos pese al desplome de la demanda de viajes y el cierre de las fronteras por el coronavirus. La mayor aerolínea de la región, Latam Airlines SA, se acogió al Capítulo 11 de la legislación de bancarrota en mayo semanas después de la misma medida por parte de Avianca Holdings SA, la mayor aerolínea de Colombia.

Aeroméxico opera rutas nacionales así como internacionales a Estados Unidos, Canadá, Europa y Asia, entre otros destinos. Delta Air Lines Inc. es su mayor accionista

Tribunal de Manhattan

La solicitud presentada ante un tribunal federal de quiebras en Manhattan enumera activos y pasivos de entre US$1.000 millones y US$10.000 millones y más de 100.000 acreedores.

La compañía dijo en la solicitud que había estado evaluando las alternativas para mejorar su posición financiera después del impacto de la crisis que afecta a todas las aerolíneas a nivel mundial.

El efectivo disponible de la aerolínea y la aprobación del tribunal para acogerse al Capítulo 11 proporcionarán suficiente liquidez para cumplir con obligaciones futuras de manera ordenada, dijo Aeroméxico. Los boletos y las reservas existentes siguen siendo válidas.

Sin rescates

Al principio de la crisis, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, descartó los rescates para grandes empresas. Pero incluso antes de la crisis sanitaria, Aeroméxico sufría el impacto de una mayor competencia que redujo su cuota de mercado.

S&P Global Ratings redujo aún más la calificación del grupo dentro del rango de basura en mayo, citando el posible impacto prolongado de la pandemia en el sector de los viajes aéreos. La calificadora dijo que había un alto riesgo de que las medidas de contención se mantuvieran durante un período más largo de lo previsto, retrasando la recuperación en las operaciones de Aeroméxico. Ello podría provocar que los indicadores de la compañía se debiliten aún más en los próximos dos años, señaló la calificadora en un comunicado.

Aeroméxico emitió deuda a cinco años por US$400 millones con un rendimiento del 7% a principios de 2020, lo que le proporcionó cierta liquidez antes de que llegara la crisis de viajes. Esos bonos han perdido valor desde entonces.

Nota Original:Aeromexico Files for Ch. 11 Bankruptcy Protection in U.S. (1)

©2020 Bloomberg L.P.