Hace 100 años, Philippe Thys lograba su tercer Tour de Francia

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Fue el primer ciclista en ganar tres veces el Tour de Francia. El belga Philippe Thys se encaminaba hace 100 años, el 27 de junio de 1920, a su tercer y último triunfo.

De París a París, porque la Grande Boucle salía de la capital hasta 1950, la carrera tocaba las fronteras del país durante 15 etapas repartidas en cuatro semanas.

La más 'corta' unía Estrasburgo y Metz, 300 kilómetros, y la más larga ,entre Les Sables de Olonne y Bayona, ¡482 km.!

Al final de aquella 14ª edición del Tour de Francia, el fundador y director de la carrera, Henri Desgrange, rendía homenaje a Thys, ya vencedor antes de la Primera Guerra Mundial en 1913 y 1914.

"El campeón belga lo tiene todo. Una cabeza bien amueblada, una experiencia consumada en las carreras por etapas, una clase superior y con su pequeño volumen, una potencia que le hace apto para todos los terrenos", le dedicó Desgrange.

En el Parque de los Príncipes, donde el Tour terminaba en una pista invadida por la multitud de espectadores, la ventaja de Thys con el segundo alcanzaba casi una hora (57 minutos y 21 segundos).

Entre los 22 supervivientes, el último quedaba relegado a 69 horas en la clasificación general, con solo ciclistas belgas situados en las siete primeras plazas.

- La sombra del dopaje -

El campeón francés de la época, Henri Pélissier, abandonó en la etapa más larga. Y fue criticado por el director del Tour en el diario organizador, L'Auto: "Tiene una gran barriga cuando en el Tour de Francia se necesita gatos flacos".

Pero, tres años más tarde, este ciclista al que se le comparaba con un 'pura sangre' lograba magistralmente la primera victoria francesa desde 1912.

Desgrange ya apuntaba al problema de dopaje. "Algunos de los nuestros no lo descartan y no veo un proceder más contrario a la idea que tenemos del deporte. No es tanto los corredores que se dopan los que son señalados, pero sí los mánagers y ciertos doctores, que no dudan en utilizar estos medios. Ellos, como nosotros, quieren que nuestra carrera se convierta en magnífica, por lo que no deberían aceptar estos procedimientos", explicó el fundador y director de la carrera.

Hubo que esperar medio siglo (1968) para que las autoridades públicas comenzaran a intentar atajar el problema poniendo en práctica los primeros controles. Un año después, el fallecimiento del británico Tom Simpson en las pendientes del Ventoux evidenció la lacra que se avecinaba.

jm/fbr/pm/psr