México: 15 muertos en el sur; ola de violencia en el centro

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CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Tras un operativo que dejó una veintena de detenidos, el gobierno de México indicó el lunes que tuvo que intervenir en Guanajuato el fin de semana porque la violencia en ese estado del centro del país era insostenible. No obstante, fue el sur el escenario de uno de los últimos actos más sangrientos: la muerte de al menos 15 personas en Oaxaca, una entidad donde desde hace años autoridades y comuneros mantienen disputas por proyectos de energía eólica, entre otros temas.

La fiscalía de Oaxaca confirmó la muerte de al menos 13 hombres y 2 mujeres en la zona del istmo de Tehuantepec, ubicado entre el Golfo de México y el Océano Pacífico. Las imágenes publicadas en las redes sociales mostraban cadáveres aplastados con bloques de cemento y algunos parcialmente quemados.

El ayuntamiento de la localidad de San Mateo del Mar indicó en un comunicado que las muertes fueron consecuencia del ataque de un grupo disidente el domingo, pero los comuneros señalaron en otro pronunciamiento la víspera que hombres ligados a autoridades locales les emboscaron en un supuesto control sanitario.

Cuarenta agentes estatales de investigación y tres médicos, así como 80 elementos de la Policía Estatal y 39 integrantes de la Guardia Nacional, se han desplazado a la zona, señaló la fiscalía. En la región hay conflictos desde hace años por la resistencia de grupos de pobladores indígenas, la mayoría de ellos pescadores, a proyectos de energía eólica.

A pesar de esos homicidios, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana Alfonso Durazo indicó que los estados del sureste del país, entre ellos Oaxaca, estaban dando los mejores resultados en materia de seguridad.

Pero uno de los quebraderos de cabeza del gobierno en estos momentos está al norte de la capital, en Guanajuato, un estado donde sólo vive el 5% de la población mexicana pero se registran más del 15% de todos los homicidios y que se ha convertido en un campo de batalla entre el Cártel Jalisco Nueva Generación, uno de los más poderosos de México, y el cártel local de Santa Rosa de Lima, dedicado sobre todo al robo de hidrocarburos.

El sábado fueron arrestados 26 presuntos integrantes de este último grupo, entre ellos la madre y hermana del líder José Antonio Yépez Ortiz, alias “El Marro”. Tras el operativo miembros de la organización prendieron fuego a una treintena de vehículos y bloquearon caminos en municipios cercanos, sembrando el terror.

“No podemos permitir que se caiga en la anarquía, el desorden y mucho menos en que se pierdan vidas humanas... ya lo de Guanajuato es una situación muy grave", dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador. “Por eso intervino la federación, porque era una situación incontrolable".

El mandatario dijo que el gobierno no podía actuar “como el avestruz y meter la cabeza en la arena y como si no pasara nada”, y pidió a la población no proteger a estos grupos criminales, a los cuales solapa en ocasiones, ya sea por miedo o por corrupción.

“Aquí aprovecho para hacer un llamado a la gente para que no se proteja a la delincuencia. Antes podía existir la justificación de que no había cómo tener ingresos, porque el gobierno estaba al servicio de una minoría rapaz, pero ahora el gobierno está atendiendo las demandas del pueblo”, agregó.