Una inmigrante filipina se suicida en un centro de su embajada en Líbano

Una inmigrante filipina se suicidó en un centro de acogida de su embajada en Líbano, donde la crisis económica afecta de lleno a los trabajadores extranjeros, informaron este domingo las autoridades consulares.

"Se está llevando a cabo una investigación sobre las circunstancias" de esta tragedia, afirma un comunicado del Departamento de Relaciones Exteriores, publicado el domingo en la cuenta Facebook de la embajada de Filipinas en Líbano.

La víctima falleció el domingo después de aparentemente "haber saltado el sábado desde la habitación que compartía con otras dos trabajadoras", según el comunicado, que precisa que llegó el viernes al centro de acogida.

Líbano atraviesa una grave crisis económica desde el año pasado, marcada por una escasez de dólares y una fuerte depreciación de la libra libanesa que ha cercenado el poder adquisitivo de la población.

Ante este colapso, agravado por la pandemia del nuevo coronavirus, muchos libaneses pagan ahora a sus empleadas domésticas en libras, en vez de en dólares como hacían antes.

Algunos incluso dejaron de pagar los salarios o las despidieron de la noche a la mañana.

La magnitud del drama condujo al gobierno libanés a anunciar el comienzo de vuelos de repatriación, empezando por Etiopía y Egipto.

Durante las últimas semanas, varias asociaciones han constatado un aumento de las peticiones de ayuda de las empleadas domésticas.

Unos 250.000 migrantes, la mayoría de ellos de Etiopía, Filipinas o Sri Lanka, trabajan en Líbano bajo un sistema de apadrinamiento o "kafala" que, según las oenegés, les priva de derechos laborales.

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