Los guardacostas italianos desmintieron el lunes el naufragio en el Mediterráneo de una embarcación cargada de inmigrantes, anunciado la víspera por la ONG alemana Sea-Watch International.
"Sobre el presunto naufragio (...) anunciado por la ONG Sea-Watch, informamos que la embarcación avistada por un avión (de la agencia europea de control de fronteras) Frontex (...) era una balsa neumática a la deriva en la zona de búsqueda y socorro libia", escribieron Guardacostas italianos en un comunicado.
Según el guardacostas, la embarcación "sin motor" había sido "probablemente objeto de una intervención de socorro de las autoridades competentes libias". Estas la habrán dejado "a la deriva" después de haber "puesto en seguridad a los migrantes que se encontraban a bordo".
Los guardacostas italianos aseguran también que las imágenes transmitidas por Frontex no muestran "cuerpos, restos u objetos flotantes (...) que podrían hacer pensar en un naufragio.
En la mañana, el ministro maltés de Relaciones Europeas y Extranjeras Evarist Bartolo también desmintió el naufragio.
El fin de semana Sea-Watch había alertado de la situación de unos 260 migrantes embarcados en cuatro barcos que navegaban entre Libia, Malta e Italia. La ONG dijo después que uno de los barcos había naufragado.
En plena crisis del nuevo coronavirus, Malta e Italia han cerrado sus puertos, una decisión que han denunciado las ONG de defensa de los migrantes.
No obstante, las autoridades maltesas socorrieron el viernes un barco con 67 migrantes, que fueron colocados en cuarentena. El domingo, un centenar de migrantes desembarcaron en Pozzallo, en el extremo sur de Sicilia.
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