ONG: Cuarentenas en Oriente Medio frenan ayuda humanitaria

Compartir
Compartir articulo

EL CAIRO (AP) — Un grupo internacional de ayuda dijo el miércoles que los cierres de fronteras para contener la pandemia del coronavirus le están impidiendo llegar a 300.000 personas en zonas de conflicto en Oriente Medio. En tanto, Libia reportó el primer caso en el país.

El Consejo Noruego para los Refugiados explicó que no pudo realizar su labor en Siria, Yemen y la Franja de Gaza, donde las autoridades han impuesto estrictas medidas para frenar la propagación del virus. Todas estas zonas tienen sistemas de salud precarios que podrían colapsar por un brote de COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, y sólo Yemen no ha reportado casos.

“Aunque los gobiernos están tomando medidas difíciles y muy necesarias para evitar la propagación del coronavirus, millones de refugiados y personas desplazadas siguen dependiendo de la ayuda humanitaria”, explicó Jan Egeland, director de la ONG.

“Si los supermercados y las farmacias pueden seguir operativos durante esta crisis, también debería estarlo la entrega de ayuda humanitaria”, apuntó.

Las naciones de la región han impuesto amplias medidas para impedir su propagación, incluyendo cierres de fronteras, cancelación de vuelos y, en algunos casos, toques de queda para confinar a la población en sus casas.

El gobierno de Israel aprobó el miércoles nuevas restricciones, incluyendo el cierre de todas las sinagogas. Las autoridades regionales han cerrado ya importantes lugares sagrados para cristianos, musulmanes y judíos.

Muchos en las comunidades ultraortodoxas israelíes habían desafiado esas restricciones y se reunían como siempre para rezar y estudiar, a pesar de las peticiones de rabinos y autoridades. Esto provocó tensiones con las autoridades y, en al menos un caso, enfrentamientos con la policía. Trabajadores municipales también pidieron a los ultraortodoxos que se fueran a sus casas, aunque con poco éxito.

La Autoridad Palestina, que gobierna partes de Cisjordania, ocupada por Israel, ordenó una cuarentena total y prohibió los desplazamientos entre ciudades, pueblos y aldeas tras detectar 58 casos.

Por otra parte, Pakistán anunció el miércoles que suspenderá todos los vuelos nacionales de pasajeros para atajar el nuevo coronavirus tras reportar cerca de 1.000 casos.

Libia ha estado sumergido en el caos desde el levantamiento de 2011 que derrocó al dictador Moammar Gadhafi. Está gobernada por autoridades rivales basadas en Trípoli y el oriente libio cuyas fuerzas llevan casi un año luchando por el control de la capital.

El martes, los suburbios de Trípoli fueron bombardeados incluso cuando Naciones Unidas pidió un cese al fuego para que las autoridades se concentren en la pandemia.

En Egipto, un toque de queda nacional de las 7 de la tarde a las 6 de la mañana entró en vigor el miércoles. El país ha confirmado 442 casos y 22 muertes.

Afganistán impuso una cuarentena en su provincia occidental Herat, que colinda con Irán y en donde se han detectado el mayor número de casos. Las autoridades afganas han reportado 76 casos y dos muertes.

Mientras tanto, Arabia Saudí expandió su toque de queda en las ciudades de La Meca y Medina, hogar de los sitios más sagrados del islam, y a la capital Riad. Los residentes ahora deben permanecer en casa de las 3 de la tarde a las 6 de la mañana. El país ha reportado 900 casos.

Irán es el más afectado en la región con más de 27.000 contagios confirmados y al menos 2.077 muertos, dijo el miércoles el vocero del Ministerio de Salud, Kianoush Jahanpour.

En la mayoría de los casos, el COVID-19 provoca síntomas leves o moderados, como fiebre y tos, que pasan en dos o tres semanas. Pero en otros, especialmente gente mayor o con enfermedades previas, puede derivar en un cuadro más grave, incluyendo neumonía o la muerte. El virus es muy contagioso y puede transmitirse sin mostrar síntomas.

El coronavirus ha infectado a más de 428.000 personas y causado más de 19.000 muertes, de acuerdo con datos de la Universidad Johns Hopkins.

___

Krauss reportó desde Jerusalén. Los periodistas de Associated Press Aron Heller en Jerusalén; Munir Ahmed en Islamabad; Jon Gambrell y Aya Batrawy en Dubái; Jan M. Olsen en Copenhague; Mohammed Daraghmeh en Ramala, Cisjordania, Nasser Karimi en Teherán y Tameem Akhgar en Kabul contribuyeron a este despacho.

___

The Associated Press recibe apoyo del Departamento de Educación Científica del Instituto Médico Howard Hughes para su cobertura de salud y ciencia. AP es la única responsable de su contenido.