Setién, nuevo entrenador del Barça, tendrá que traer estilo además de trofeos

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Quique Setien en el Camp Nou, Barcelona, España, 11 de noviembre de 2018. REUTERS/Albert Gea
Quique Setien en el Camp Nou, Barcelona, España, 11 de noviembre de 2018. REUTERS/Albert Gea

Por Rik Sharma

BARCELONA, 14 ene (Reuters) - Quique Setién fue nombrado entrenador del Barcelona a última hora del lunes, con la misión de restaurar el estilo de control del balón del club, pero el nombramiento representa una gran aventura para los catalanes, dada la falta de éxito del nuevo técnico al más alto nivel.

Mientras que su predecesor, Ernesto Valverde, ganó dos títulos de la Liga en dos años y ha dejado al equipo de nuevo en cabeza de la competición a mitad de esta temporada, Setién (de 61 años), aparte de algunos éxitos en la tercera división española en 2011 no ha logrado ningún título como entrenador.

Su mejor resultado en la Liga fue como entrenador del Real Betis en 2018, llevándolo a la sexta posición y clasificándolo para la Liga Europa, pero salió del club la temporada pasada cuando el equipo terminó en la décima posición.

El excentrocampista del Racing de Santander y del Atlético de Madrid se perdió al frente del Betis, y los aficionados se volvieron en su contra a pesar de su fútbol ofensivo de posesión, pidiendo más pasión y menos precisión.

Sin embargo, al menos desde el punto de vista estilístico, Setién debería encajar perfectamente en el Barcelona, que se inspiró en el equipo dirigido por Johan Cruyff cuando jugó contra ellos a finales de los años ochenta.

"(Cuando vi a su Barcelona empiezo) a darle mucho sentido tácticamente a lo que (había) estado sintiendo durante toda la vida... que un equipo tenga el balón permanente y ver a otro cómo está corriendo detrás de él casi todo el partido ", dijo Setién a The Coach's Voice.

"A través de ahí es cuando (empiezo) a analizar un poco las cosas, a ver el fútbol, a ver lo que siento y lo que quiero, y es lo que me influye, (lo que) el día que fue entrenador (quise) poner en práctica".

Después de la época de Pep Guardiola y Tito Vilanova, el Barcelona empezó a perder parte de su chispa aunque seguía recogiendo trofeos a un ritmo impresionante.

Bajo la dirección de Luis Enrique y después de Valverde, la atención se desplazó desde el trabajo en equipo hacia lo individual, y jugadores de élite como Lionel Messi y Luis Suárez fueron adquiriendo cada vez más importancia.

Setién, un entusiasta del ajedrez cuyo paso al Barcelona ha sonado en los medios en el pasado, deberá reorganizar las piezas para devolver a los catalanes su identidad.

Como descubrió Valverde, los trofeos nacionales no son suficientes en el Barcelona. Los aficionados exigen el éxito en la Liga de Campeones, así como demostraciones de calidad.

Setién dio un ejemplo de lo que sus equipos son capaces de hacer la temporada pasada cuando el Betis venció al Barcelona por 4-3 en el Camp Nou, el primer equipo en dos años que triunfó en el estadio del club catalán y también el último en hacerlo.

Si esa fue la entrevista para hacerse con el trabajo de técnico, la superó.

(editado por Peter Rutherford; traducido por Tomás Cobos)