Pareto cambió al judo por el buceo en Semana Santa

La "Peque" viajó a Puerto Madryn para hacer un vía crucis submarino. Dijo que necesitaba descansar unos días antes de continuar su preparación para los Juegos Olímpicos de Río

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Paula Pareto es todo terreno. Campeona mundial de judo y primera en el ranking olímpico tras un 2015 de ensueño, la atleta de 30 años nacida en San Fernando se ha convertido en un ícono del deporte argentino (tras el bronce olímpico en 2008).

No sólo de judo vive una joven tan inquieta y enérgica como la Peque. Recibida de médica desde hace dos años, tras una carrera que compartió con la exigencia que supone un calendario de deportista top, la judoca también es una apasionada de otros deportes. Por caso, cada sábado juega al fútbol con sus amigas y, cada tanto, hay actividades que despiertan su interés. Y dos que tenía en mente las pudo cumplir en Semana Santa en Puerto Madryn.

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A cinco meses del comienzo de los Juegos Olímpicos, cita que la tendrá como una de las máximas esperanzas de medalla de la delegación arg

entina,

Paula

programó un descanso de dos días en su preparación y se hizo un viaje a la bella ciudad chubutense junto a su madre. Su propósito fue desconectarse de ese cable llamado

Río

para vivir momentos únicos:

nadar con lobos marinos

, tener un bautismo de buceo y participar del

Vía Crucis Submarino

, evento único en el mundo.

"

Siempre fueron experiencias que quise tener. No soy una amante del agua, pero las había visto y me llamaban la atención. Me encanta la naturaleza y más aún la interacción con animales

",

contó

Pareto

.