Más detalles del fallido operativo de captura de Ibar Pérez Corradi en Paraguay

Entre versiones cruzadas y desmentidas, la información sobre la supuesta detención de Ibar Esteban Pérez Corradi empieza a arrojar algo de luz sobre lo que sucedió ayer desde primera hora de la mañana con el paradero del prófugo.

A media mañana del viernes, según la versión a la que accedió Infobae de fuentes directas de la investigación, un grupo de gendarmes argentinos –autorizados, según las fuentes, a operar en el país vecino- que desde hacía días vigilaban los movimientos del prófugo fueron avisados de la detención de un ciudadano argentino en inmediaciones del Paraná Country Club, de rasgos similares a los de Pérez Corradi.

Lo había apresado la Policía local, cerca de un restaurante, a unos 200 metros del complejo de Ciudad del Este, en la localidad de Alta Paraná, en el que Pérez Corradi visitaría con frecuencia a su pareja, embarazada de varios meses.

El detenido había sido demorado junto a un menor y dos mujeres jóvenes. Los efectivos argentinos hicieron contacto con el capturado: si bien tenía algunas características similares al prófugo –pelo recogido, por ejemplo-, los gendarmes descartaron que se tratara de él. Le tomaron los datos, cotejaron su documento –paraguayo- e hicieron una captura del mismo. El sospechoso, de nombre Marcelo, músico, se movía en un automóvil KIA con chapa paraguaya. Es un fuerte indicio de cuál habría sido el origen de la noticia sobre la detención del prófugo.

Por esas horas, la noticia sobre la supuesta detención de Pérez Corradi, buscado hace más de tres años y medio por autoridades argentinas y estadounidenses, sindicado por la Justicia como presunto autor intelectual del Triple Crimen, explotó en nuestro país. Desde ese momento, una catarata de rumores y versiones sobre la confirmación, o no, de la captura se tornó imparable. Alimentada por el silencio del Gobierno argentino y la rotunda desmentida de las autoridades paraguayas. Desde ayer, la investigación por el Triple Crimen se unificó con la de la efedrina en manos de la jueza María Romilda Servini de Cubría.

Según información de los investigadores, Pérez Corradi seguiría dentro del country. Fuertemente vigilado por efectivos nacionales y paraguayos: tendría cercadas las salidas al río y los accesos por tierra. "Tenemos la confirmación de que sigue ahí y está más escondido que nunca", explicaron a este portal fuentes de la investigación. Desde ayer, se montó un férreo operativo en conjunto entre autoridades locales y de aquel país, con presunta colaboración de investigadores de una agencia antidrogas.