Uruguay: denunciaron a un ex preso de Guantánamo por violencia doméstica

La justicia investiga al sirio Omar Mahmmoud Faraj por agredir a su esposa, una uruguaya convertida al islam. El pasado año, otro de los ex reos refugiados en el país fue denunciado por su pareja

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 AFP 163
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Uno de los seis ex reos del penal estadounidense de Guantánamo que Uruguay acogió en 2014, el sirio Omar Mahmmoud Faraj, recibió una denuncia de parte de su esposa, una uruguaya convertida al Islam, por supuesta violencia doméstica, confirmaron fuentes jurídicas y del entorno del denunciado a la agencia de noticias EFE y al diario El País de Uruguay.

En concreto, el juez de lo penal, que solicitó a la policía antecedentes del sirio, de unos 40 años de edad, dispuso el pase a forense de la mujer supuestamente agredida y que se enterara del caso la Justicia Especializada en Violencia Doméstica y estableciera, de considerarlo, las medidas cautelares pertinentes.

Otro de los ex reos fue denunciado el año pasado por su pareja

Desde el entorno del ex recluso negaron las acusaciones de la demandante, con quien se casó el pasado año, y confirmaron a EFE que la denuncia fue interpuesta este viernes, por lo que el hombre estuvo declarando en la comisaría, aunque actualmente se encuentra en libertad.

Ya el pasado año, otro de los ex reos, el tunecino A.B.M, fue denunciado por su pareja, la uruguaya con quien vivía en Montevideo, por amenazas verbales, por lo que se dictó una orden de alejamiento que la Justicia acabó levantando al considerar que ya cesó el riesgo.

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Estos cuatro sirios, un tunecino y un palestino fueron acogidos en diciembre en Uruguay como parte del compromiso del entonces presidente, José Mujica (2010-2015), de colaborar con su par estadounidense, Barack Obama, en el plan de cierre del penal radicado en la base naval estadounidense en Guantánamo (Cuba) para acusados de terrorismo.

En una carta pública en diciembre de 2014, Faraj relató sus orígenes en Siria, su traslado a Irán para buscar trabajo y luego a Afganistán, su huida a Pakistán, su detención y entrega a militares de EEUU y su traslado a Guantánamo en 2002.