El chavismo desvió el avión para detener a Manuel Rosales

La diputada opositora Delsa Solorzano viajaba con el ex candidato presidencial y, en diálogo con Infobae, detalló cómo fue el momento del arresto. "Nunca vi tantos militares brutalmente armados", aseguró

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"La primera irregularidad es que desviaron el avión para el sector nacional del aeropuerto", explicó Delsa Solorzano, diputada al Parlamento latinoamericano por el mismo partido de Rosales –Un Nuevo Tiempo- . Según explicó, ese "no lugar que supone el área internacional" era un impedimento para que lo detuvieran. Rosales llegó en una nave proveniente de Aruba, así que debió aterrizar en la zona internacional de la terminal.

El ex candidato a la presidencia de Venezuela en 2006 regresó al país hoy tras vivir seis años en el exilio. Pese a las advertencias del régimen de Maduro, que anticipó que sería "aprehendido inmediatamente", tomó la decisión para demostrar que es inocente de los delitos por los que lo acusan.

"Fue sorprendente la cantidad de funcionares militares brutalmente armados que rodearon el avión"

Según relató Solorzano, había un fiscal esperándolo que se subió al avión no bien éste tocó tierra. El arresto fue una demostración de fuerza militar chavista. "Fue sorprendente la cantidad de funcionarios militares brutalmente armados que rodearon el avión. El despliegue que vimos hoy no lo vimos ni para arrestar al mayor criminal del país", aseguró.

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Según el detalle de su compañera de partido, el arresto se hizo en "flagrante violación de sus derechos procesales". La diputada explicó que le impidieron que su abogado lo acompañe y que se lo llevaron por una "escalerilla auxiliar".

"Los efectivos miliares le quitaron los celulares a los periodistas"

"No se le permitió el derecho de ley de estar acompañado de su abogado de confianza y ahora está quién sabe dónde sin abogado", denunció Solorzano.

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Además, reveló que los efectivos miliares le quitaron los celulares a los periodistas que lo acompañaban en el vuelo e intentaron barrar fotos de los móviles de sus familiares.

Rosales está acusado de cometer presuntos actos de corrupción cuando ejerció como gobernador del estado Zulia, cuya capital es Maracaibo, entre los años 2000 y 2008, y antes como alcalde de esa ciudad de 1996 a 1999. El opositor, que fue propuesto por su partido para ser candidato a las elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre, pese a que fue inhabilitado en junio pasado para optar a cargos públicos por la Contraloría.