Axel Kicillof desafía al juez Griesa: nuevo bono puede ser comprado por inversores del exterior

El Bonar 2020 tendrá las mismas carácterísticas que el Bonar 24, el título que quieren embargar los holdouts en los tribunales de Nueva York. Economía mantiene su postura de que no puede ser tocado al ser emitido en la Argentina con leyes locales

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 Nicolás Stulberg 162
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La estrategia del Ministerio de Economía es clara: recuperar la mayor cantidad de dólares que saldrá por el Boden 2015. La emisión de un nuevo título, el Bonar 2020, tratará de captar parte de los "huérfanos" que deja el Boden y la necesidad de parte de los inversores de tener un bono que paga una tasa elevada en comparación con pares de la región.


Incluso, Economía confirmó que el esquema del Bonar 2020 es idéntico que el Bonar 2024. El dato clave es que la emisión -sea por los USD500 millones o el monto que termine convalidando- puede ser comprada por inversores del exterior. Así podría conseguir dólares frescos. Incluso podría suceder lo mismo que con el Bonar 24 cuando se hicieron de USD1.500 millones la última vez.


Los inversores del exterior pueden "venir" a la Argentina a comprar el bono vía un agente de mercado argentino. Lo mismo que el Bonar 24. En esa oportunidad, el Deutsche era quien canalizaba la orden desde el exterior. ¿Lo volverá a hacer?


El título que van a emitir la semana que viene tiene el atractivo de que pagará un cupón del 8% (poco menos que el Bonar 24). Pero en el mercado se estima que saldrá bajo la par, por lo tanto el rendimiento será mayor para el inversor.


De hecho, estiman en el mercado, si el Gobierno quiere capatar más que los USD500 millones que puede conseguir con las aseguradoras y otros privados, deberán subir la tasa. ¿Cuánto? El mercado podría pedirle entre 10% y 11% por este título ya que el Bonar 24 rinde actualmente 10,5%. "Pueden levantar bastante pero tienen que estar dispuestos a pagar", decía un operador de un banco internacional.


La estrategia de colocar un nuevo bono tiene sus riesgos en el frente externo. Tranquilamente el juez Thomas Griesa puede interpretar que el Gobierno está vendiendo un bono a los inversores sin haber cumplido con sus sentencias de pari passu. El caso podría ser idéntico que el del Bonar 24, del cual aún está pendiente la decisión sobre si fue un endeudamiento externo o sólo local.


Claro que Economía reafirma que al ser un bono emitido en la Argentina con ley local la jurisdicción de Griesa no tiene nada que hacer ahí. Pero lo cierto es que los fondos buitre han logrado generar una causa judicial más por el Bonar cuando se detectó que casi la totalidad de esa emisión había sido comprada desde el exterior.


Mientras que aún en los tribunales de Nueva York no hay decisión sobre la embargabilidad del Bonar 24 (lo que piden los holdouts liderados por Elliott y Aurelius), Economía sale a desafiar a los fondos buitre para recupera dólares de las reservas.


"Esta colocación de deuda pública se enmarca dentro de la estrategia que el Estado Nacional viene realizando desde diciembre pasado a fin de diversificar las fuentes de financiamiento del Gobierno Nacional. En esta oportunidad tiene un objetivo adicional que es ofrecer a los ahorristas que tenían Boden 15 un título de similares características", dijo Kicillof en la conferencia de prensa cuando anunció el nuevo bono.


La semana que viene empieza la pulseada entre el Gobierno y el mercado por la tasa. Y los holdouts seguirán de cerca la emisión para lanzar otra ataque en los tribunales de Nueva York.