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El mercado inmobiliario porteño, aunque es un fenómeno extendido a todo el país, sigue afectado por las restricciones para efectivizar las operaciones en dólares, que es la práctica más arraigada, dada la veda al uso de ese medio de pago que rige desde junio de 2012, aunque las autoridades permiten las compras para ahorro.
Además, observan los operadores que la baja del tipo de cambio libre en los últimos meses generó un efecto riqueza negativo que contribuyó a debilitar aún más una actividad que acumula 37 meses de receso en el cotejo interanual en los últimos 39, cuando la plaza se vio sorprendida por la implementación del cepo cambiario.
El vicepresidente del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, Bernardo Mihura de Estrada, dijo a InfobaeTV que "se creía que el mercado había alcanzado un piso en el último año, pero enero y febrero fueron peor aún".
La magnitud de la retracción de la plaza inmobiliaria no sólo se manifestó en una caída de 18,4% de la cantidad de escrituras respecto de un año antes, cuando había insinuado una modesta tonificación, sino que además de ubicarse en el peor febrero de los últimos 30 años, se contrajo el valor nominal del total de las operaciones en 12,8%, a 1.408 millones de pesos.
En febrero cayeron las escrituras en cantidad de actos y monto total en pesos
Los datos aportados por el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires dieron cuenta de que "en febrero 2015 se contrajo la cantidad de actos escriturales respecto del año anterior en todos los segmentos, aunque de modo más acentuado en los inferiores a los $500.000: 31,6% hasta $150.000; 35,5% en el siguiente hasta $250.000; y 30% en el rango de 250.000 a 500.000 pesos, mientras que en las franjas superiores declinaron apenas 4,2% en la que se extendió hasta $900 mil y 0,2% en la de más de 900 mil pesos".
Una clara medida de la contracción del mercado lo da que mientras en febrero de 1998 se hizo en la Ciudad una escritura por cada 640 habitantes del distrito, 17 años después esa relación se deterioró a un registro de compraventa por cada 1.889 habitantes, es decir, se contrajo a menos de la tercera parte.
El primer bimestre del año cerró con sólo 3.352 actos, un 16,7% menos que en igual período del año anterior, mientras que el monto acumulado de las operaciones descendió en 9,3 por ciento.