El titular de Shell que protagonizó una resonante pelea con Kirchner podría sumarse a la política

Corría el año 2005 cuando Néstor Kirchner llamó a boicotear a la empresa Shell por desoír su pedido de no aumentar las naftas: "No hay que comprarle ni una lata de aceite", pidió el entonces presidente de la Nación. Fue el primer choque de Juan José Aranguren (en ese momento ya era el titular de la petrolera) con el kirchnerismo.

Hace algo más de un año, Aranguren se cruzó con el ministro de Economía, Axel Kicillof, quien lo había acusado de haber sido uno de los promotores de la devaluación que llevó a cabo el Gobierno en enero de 2014 y sostuvo que el Banco Central estaba al tanto de las operaciones que iba a realizar Shell.

Paradójicamente, la noticia ahora es que, en el tramo final del kirchnerismo, el empresario también se va de la petrolera en la que trabajó durante 37 años: la empresa angloholandesa comunicó que el 30 de junio próximo su actual presidente se retirará de la compañía e hizo saber que a partir del 1 de julio dicho cargo será ocupado por Teófilo Lacroze.

El directivo saliente fue destacado en los últimos tiempos por su entereza ética en defensa de su empresa, ya que peleó con dureza frente a los obstáculos que le puso el actual gobierno a la política de precios de la petrolera y ganó en todas las instancias judiciales los embates que le propinó el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno.

A través de un comunicado, Shell mencionó la salida de Aranguren destacando que ello ocurrirá "luego de 37 años de fecunda trayectoria, habiéndose desempeñado en los últimos 12 como presidente de su Directorio en el país".

En tiempos en que no convenía enfrentar al Gobierno, el modo de proceder de Aranguren no fue ponderado por sus pares, aunque en los últimos tiempos se lo suele reconocer con menciones y aplausos cada vez que se presenta en reuniones empresarias.

La noticia no hizo más que potenciar los rumores sobre su desembarco en la política, que surgieron hace tiempo. Y todo indica que, en caso de decidirse a participar en la actividad, el ejecutivo se sumaría a la fuerza que lidera Mauricio Macri.

Si le dan la opción de elegir -adelanta La Nación-, Aranguren prefiere un cargo ejecutivo antes que legislativo: lo seduce conducir YPF, pero también aceptaría la jefatura de un ministerio vinculado al área energética.

El empresario ingresó a Shell Argentina en el año 1996 y desarrolló su carrera en la compañía ocupando diversos cargos en las áreas de Finanzas, Ventas y Operaciones, Planeamiento de la Red, Suministros y Distribución, tanto en la Argentina como en el exterior".

Desde 2011 a hoy, Lacroze se desempeña como vicepresidente Ejecutivo del área Comercial de Raízen, una joint venture entre Shell y el Grupo Cosan de Brasil, se indicó.