"Scioli va a hacer lo que sea necesario para ser presidente, es su meta desde hace muchos años"

El periodista Walter Schmidt, co-autor de la biografía "Scioli secreto", habló con Infobae sobre por qué el gobernador bonaerense es un "bicho raro" de la política y cómo sería su gestión al frente de la Rosada. Reveló que el mandatario provincial quiso ir a la estación Once el día de la tragedia ferroviaria pero el Gobierno no se lo permitió

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 NA 162
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-Hay un consenso acerca de que Daniel Scioli es un político inescrutable, siendo más conocido por su historia de vida y sus amigos famosos que por sus ideas políticas. Luego de dos años de investigarlo y hablar con él para hacer este libro, ¿cómo lo definirías?

Nos interesó hacer un libro sobre Daniel Scioli justamente porque es un bicho raro de la política, es alguien que la gente no considera un dirigente tradicional, lo ven más como alguien relacionado con la farándula, o el mundo empresarial, y lo que nos dimos cuenta es que es un personaje conocidísimo públicamente, no hay particularmente nadie en la Argentina que desconozca quién es Daniel Scioli, pero todos ignoran cómo es su vida y qué proyectos e ideas tiene. Después de adentrarnos en su mundo durante dos años, nos da la sensación de que su pensamiento es una síntesis del menemismo, del duhaldismo y del kirchnerismo. Pero lo que hay que entender de Scioli es que él razona como deportista, y un deportista tiene desafíos permanentes. Una vez que cumple su meta, enseguida tienen que tener otra, y hoy la meta de Daniel Scioli es la presidencia de la Nación, por supuesto.

-Junto a Pablo Ibañez, el co-autor del libro, se preguntan desde el propio título cómo es que Scioli sobrevivió a 20 años de política argentina, sobrellevando la impopularidad de Menem, Duhalde, y ahora del Gobierno nacional. ¿Cuál es su secreto?

Creo que el peronismo es un espacio político que le vino muy bien a Scioli para manejarse en esas aguas turbulentas y con diferencias ideológicas. El haber estado con Carlos Menem, con Eduardo Duhalde, y el matrimonio Kirchner, le permitió sobrevivir a las distintas etapas siendo siempre leal a su jefe, porque hay momento en los que Scioli se niega a confrontar con Menem cuando fue candidato a vicepresidente en la fórmula con Néstor Kirchner. Luego se niega a confrontar con Eduardo Duhalde en 2005, cuando Kirchner busca quedarse con el PJ. Esas lealtades son valoradas y le permitieron posicionarse. Siempre ha sido leal a su jefe del momento, esta es la primera vez que no tiene uno, más allá de que la líder sea Cristina Kirchner.

-En el libro revelan que la frase de cabecera de Scioli es "El que se enoja, pierde", algo que solía decir Carlos Menem. ¿Forma parte de su filosofía de vida o es una mera estrategia política para lidiar con los ataques del kirchnerismo?

No, es su filosofía de vida. Y hay otra frase de Menem que él utiliza mucho, que es "lo mejor está por venir", y es parte de lo que decía del razonamiento del deportista de tener una meta, de pensar siempre hacia adelante. Toda esa fe y esperanza que predica, que parece un cassette que tiene puesto y lo repite, es algo que tiene incorporado.

-Mucha gente considera que si llega a ser presidente va a darse un escenario de "Scioli al gobierno, Cristina al poder", mientras otros aseguran todo lo contrario, que Scioli se desligaría rápidamente del kirchnerismo. ¿Cuál es tu opinión?

Yo creo que tiene un proyecto propio, que Scioli sabe lo que va a hacer en cada área de gobierno. No es un proyecto kirchnerista, ni menemista ni duhaldista, como te dije, seguramente sea una síntesis de todo eso. Él ha tomado de sus jefes políticos estilos de conducción, de gestión, que los ha aplicado en la gobernación, y creo que los aplicaría también en una virtual presidencia. Lo que sí no creo que expulse a nadie. Una de las características suyas que nos llamó la atención es lo avasallador que es a nivel laboral con su gente, entonces es probable que si encuentra un colaborador que esté a la altura de esa exigencia, él lo va a mantener, sin importar de dónde venga.

-Para el libro entrevistaron a Scioli y también a gente de su entorno y funcionarios. ¿Fue fácil obtener ese acceso?

Esa fue otra cosa que descubrimos en la realización de libro: nadie habla o hace nada si Scioli no lo autoriza, hace un minucioso seguimiento de todo lo que se dice sobre él. Sin embargo, en el libro no nos dedicamos a explicar quién es Scioli, porque sería tomar partido y esa no es la idea, sino que contamos su vida cotidiana, cómo gobierna, cuál es su carácter, y después que el lector saque las conclusiones de si eso le parece bien o mal.

-Dan cuenta de la relación distante que mantiene con la Presidente a lo largo de las páginas. ¿Por qué se produce ese vínculo tan malo? ¿Es una cuestión de afinidades personales o simplemente Cristina no quiere que él se quede con el liderazgo del Justicialismo?

Quizás hoy confluyen los dos factores, porque Cristina Kirchner tiene que conservar el poder, pero lo concreto es que nunca tuvieron una excelente relación, porque Cristina era un cuadro político tradicional y Scioli había sido motonauta, y eso siempre los distanció de alguna forma. Scioli siempre necesitó un jefe, y en el caso de Cristina Kirchner ella nunca estuvo interesada en conducirlo a él. Por eso la ausencia de diálogo e interacción política.

 AFP 162
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-En el libro aparece un dato desconocido hasta el momento, y es que el día de la tragedia de Once Scioli quiso ir al lugar ya que había muchos bonaerenses que viajaban en ese tren y el Gobierno nacional no lo dejó porque iba a hacer quedar mal a Cristina, que no quería ir.

Scioli siempre tomó como prioridad de su gestión ir al lugar, dar la cara. Pasó con los episodios policiales que tuvieron rebote mediático, donde siempre estuvo ahí, y esa es una actitud que la gente valora. A veces lo han terminado insultado o agraviando, pero reconocen que al menos el gobernante estuvo ahí. Y siempre que hay una catástrofe lo vas a ver en el lugar, algo que no es tan común.

-Scioli suele ser señalado como el candidato preferido del Papa para las próximas elecciones. ¿Esto es así o se trata de algo plantado por los operadores sciolistas?

Si uno observa los tres candidatos que se destacan, que son Scioli, Macri y Massa, Bergoglio a quien más conoce es a Daniel Scioli, mantienen un vínculo muy estrecho que también se extiende hacia quienes son ahora funcionarios bonaerenses. De todas formas no podría afirmar que Scioli es el candidato de Bergoglio, aunque la buena relación es innegable.

-Por último, ¿ considerás que en caso de que Scioli no sea elegido como candidato por el Frente para la Victoria, él se lanzaría igual por fuera de ese espacio?

Lo que nos quedó claro haciendo este libro es que Scioli tiene esta meta desde hace muchos años. Él no va a hacer nada con su candidatura que vaya a restar un solo voto, lo que sea necesario lo va a hacer. Si hay algo que lo obstaculiza, lo va a sortear de la mejor manera, estando dentro del espacio, pero no va a permitir que nadie se interponga entre él y su deseo de ser Presidente ... salvo el voto de la gente, claro.

"Scioli secreto", de Walter Schmidt y Pablo Ibañez (Sudamericana).