En un comunicado difundido este lunes, Poder Ciudadano manifestó su "preocupación" por "el escaso tiempo" que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires prevé para la implementación del sistema de boleta electrónica, "teniendo en cuenta que las PASO este año se realizarán el día 26 de abril y el sistema aún no ha sido definido".
En noviembre, el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri reglamentó el sistema de voto electrónico que, por primera vez, los ciudadanos de la Capital Federal usarán en las elecciones primarias de este año, un método de sufragio que ya fue estrenado en varias provincias y comicios de competencia local.
"La puesta en funcionamiento de la boleta electrónica requiere de la adaptación del ciudadano a las nuevas tecnologías con el objetivo de que los votantes acepten, confíen y le den legitimidad al nuevo sistema, evitando de este modo cambios traumáticos", sostiene Poder Ciudadano, y agrega que "la mayoría de los distritos que han adoptado nuevos sistemas de votación electrónica alrededor del mundo lo han hecho en forma progresiva, comenzando, por ejemplo, por un porcentaje de la población y adaptando el proceso de acuerdo a las necesidades". Por ese motivo, la ONG advirtió "que el tiempo disponible para la contratación, pruebas del sistema, capacitación a autoridades, actores políticos, y ciudadanos, pone en riesgo la confianza y legitimidad de los comicios".
Entre los problemas que Poder Ciudadano identificó se encuentran:
• El escaso tiempo disponible hasta la elección de abril difícilmente sea el necesario y prudente para llevar adelante una licitación pública ordenada y con las garantías de transparencia necesarias para la contratación de un sistema de tal importancia.
• En caso de que se realice la licitación pública, el escaso tiempo que la separa del proceso electoral no garantiza las condiciones para un escenario competitivo y transparente en el cual varios oferentes puedan participar legítimamente del proceso licitatorio, con el consiguiente riesgo de que la licitación sea direccionada a una sola empresa.
• Una contratación directa iría en detrimento de la transparencia necesaria para este tipo de cuestiones donde entra en juego un alto presupuesto y por sobre todo la legitimidad y credibilidad de las elecciones.
• No es saludable para la democracia de la Ciudad que los partidos políticos a tres meses de las elecciones no tengan certeza sobre el sistema de votación, yendo esto en detrimento de la estrategia electoral y capacitación de sus fiscales.
• La puesta en marcha de un nuevo sistema de votación requerirá de autoridades de mesa fuertemente capacitadas que puedan dar solución a cualquier inconveniente que le surja al ciudadano al momento de votar. Las autoridades de mesa deben ser elegidas al menos 30 días antes de las PASO, sin embargo, al modificarse el sistema resulta complejo suponer como se los capacitará en un lapso tan acotado de tiempo. La misma preocupación recae sobre la ciudadanía.
• La adopción de nuevos sistemas de votación requiere de un consenso sólido de todos los actores políticos involucrados. En caso de terminar aplicándose el sistema, surge como necesario la creación de una comisión o consejo de seguimiento del proceso, que involucre a representantes de los partidos políticos, actores estatales, y organizaciones de la sociedad civil, intentando darle solidez a un proceso inentendiblemente apresurado.
El comunicado afirma que "la Ciudad de Buenos Aires no está siguiendo un camino lógico y planificado para la implementación del sistema de boleta electrónica que implica un cambio significativo en la forma de votar de los ciudadanos", pues "este cambio de sistema requiere de una planificación y un cronograma serio para que el resultado sea exitoso y legítimo". "En consecuencia, Poder Ciudadano solicita que se habiliten mecanismos necesarios de participación y transparencia a través de la conformación de un espacio de consulta y seguimiento del proceso que les dé voz a todos los actores involucrados y afectados", concluye.