¿Por qué se habla tanto de la culebrilla? Mitos y verdades

La aparición en el mundo y en la Argentina de la vacuna contra el virus del herpes zóster, conocido como culebrilla, relanzó el tema. Lo que hay que saber sobre una infección eruptiva que "vive agazapada en el organismo" a partir de los 50

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En tiempos donde las sociedades modernas luchan por controlar las pandemias, también es necesario ocuparse de las enfermedades más clásicas: entre el 90% de la población de más de 40 años que tuvo varicela, una de cada tres personas va a desarrollar herpes zóster (HZ) en su vida, al tener latente el virus.

Con la edad aumenta el riesgo de padecer esta infección eruptiva, pero lo más significativo es el dolor debilitante que suele acompañarla: alrededor de la mitad de los pacientes lo sufre por más de un mes, mientras que uno de cada cuatro tiene un dolor invalidante que puede persistir meses o años después de la erupción; a esta complicación se la conoce como neuralgia post-herpética (NPH).

En los Estados Unidos la agencia federal de control de los alimentos y medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó la vacuna en el 2006, y en la Argentina se aprobó en marzo de 2013, por disposición 1850 del Ministerio de Salud y de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT).

¿De qué se trata la culebrilla?

La reactivación del virus de la varicela zóster aparece en la piel como un sarpullido o erupción a lo largo del recorrido de un nervio, también puede aparecer como cosquilleo o dolor intenso.

El infectólogo argentino Daniel Stamboulian, presidente de la Fundación del Centro de Estudios Infectológicos FUNCEI, explica a Infobae: "Las zonas del cuerpo más afectadas suelen ser el torso (torácica o lumbosacra) y alrededor de los ojos. Esta enfermedad puede tener un impacto negativo en todas las dimensiones de la calidad de vida: el herpes zóster (HZ) genera pérdida de apetito y de peso, insomnio, cansancio, reducción de la movilidad o inactividad, mientras que en el aspecto psicológico puede provocar ansiedad, depresión, estrés y dificultad para concentrarse".

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También puede afectar la vida social al interferir la capacidad de llevar adelante actividades diarias y ocasionar pérdida de independencia o aislamiento. Puede haber también otras complicaciones agudas como alodinia (percepción anormal del dolor), sobreinfección bacteriana, pérdida auditiva, meningoencefalitis, glaucoma y ceguera.

Hay que considerar que el tratamiento del herpes zóster solo es efectivo si se aplica dentro de las 72 horas desde su aparición, pero tiene poco valor para combatir el sufrimiento asociado.

El principal factor de riesgo para desarrollar herpes zóster se relaciona con el envejecimiento y la disminución de las funciones del sistema inmunológico.

Por eso, es más común después de los 50 años, y tanto el riesgo de HZ como su gravedad aumentan con la edad. Además, las defensas pueden debilitarse por otras causas como el uso de medicación como corticoides o la presencia de enfermedades como cáncer o VIH-sida.

Sobre la vacuna

Hasta hace poco existían distintos fármacos antivirales con el objetivo de acortar y reducir la severidad de los síntomas del HZ, pero sólo son efectivos si se administran antes de que aparezca la erupción. La vacuna en este caso también protege en un 66 por ciento las posibilidades de desarrollar neuralgia postherpética.

Como más del 90% de la población tuvo varicela, no es necesario hacer un análisis antes de vacunarse. Se administra una sola dosis en el brazo y puede recibirse al mismo tiempo que la antigripal o la antineumocócica, pero en distinto brazo.

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Puntualiza el doctor Stamboulian: "En Argentina está indicada para todos los adultos de más de 50 años, según disposición de la ANMAT, incluidos quienes ya tuvieron zóster. No pueden recibirla quienes tengan fiebre superior a 38 ºC, estén inmunocomprometidos, cursen una enfermedad aguda de moderada a severa o estén embarazadas".

Existen divergencias entre los países sobre la edad a la que debe aplicarse la vacuna: "En Estados Unidos la FDA aprobó la vacuna para su uso a partir de los 50 años y el Comité asesor de Prácticas de Inmunización en EEUU (ACIP por sus siglas en inglés) la recomienda a partir de los 60 años".

"Es una vacuna de virus vivos atenuados que se tolera muy bien. Se da una sola vez en la vida y la indicación es que todas las personas de más de 50 años se la pueden aplicar".

El herpes zóster o "culebrilla" es una enfermedad "agazapada" en el organismo.

El 90% de la población de más de 40 años en Argentina que tuvo varicela debe estar atento, ya que uno de cada tres va a desarrollar HZ en su vida, por tener latente el virus en su organismo.

Baja inmunológica

La vacuna que llegó a la Argentina a través del laboratorio MSD reduce un 61 por ciento las posibilidades de contraerla y refuerza el concepto de la vacunación en el adulto. Y el costo ronda entre los mil y los mil quinientos pesos.

El jefe de Infectología del CEMIC, Pablo Bonvehí, refuerza: "A partir de los 40 años, comienza todo un deterioro inmunológico en las personas y es por eso que los refuerzos de vacunas se vuelven "escudos" indispensables para prevenir enfermedades. De a poco se empieza a tener más conciencia de la prevención a través de vacunas, como ocurrió con la antigripal, y es muy importante que esto sea tenido en cuenta por los adultos para superar nuevos retos".

En referencia a la neuralgia postherpética, se trata de la principal y más frecuente complicación. La doctora Hebe Vázquez, infectóloga de FUNCEI, explica: "Ese dolor crónico sigue el recorrido del nervio, es como que el nervio se pela y da dolor. Para que esto cese, el nervio tiene que reconstruirse y cuantos más años tiene una persona, más tarda, por lo tanto puede pasar hasta un año. Por eso la importancia de esta nueva vacuna como método preventivo, que hasta el momento no existía".

Daniel Stamboulian revela: "El 20 ó 30 por ciento de quienes padecen "culebrilla" desarrollan neuralgia postherpética. Es un dolor incomparable, por eso la vacuna con la que podemos contar hoy representa una herramienta fundamental contra esa enfermedad tan invalidante".