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La liberación de Hugo Carvajal por parte del Reino de Holanda se produjo después de que Venezuela elevara la presión económica y militar en dos islas holandesas en el Caribe, dijo el fiscal general de Aruba, Peter Blanken, al Wall Street Journal. Según el funcionario, barcos de la Armada venezolana se acercaron a Aruba y Curazao durante el fin de semana en el que los funcionarios holandeses debatían qué harían con el ex jefe de la Inteligencia militar que se encontraba preso, acusado en los Estados Unidos por narcotráfico.
"La amenaza estaba allí", dijo Blanken al periódico, y reconoció que tuvo un efecto disuasorio sobre la población. "No sabemos cuáles eran sus intenciones, pero creo que un montón de gente en Aruba tenía miedo de que algo iba a suceder", agregó.
Blanken sostuvo que el régimen de Nicolás Maduro también amenazó con cortar los vitales enlaces aéreos comerciales que unen a las islas de Aruba y Curazao con el continente. La petrolera estatal Pdvsa también presionó con la advertencia de que podría retirarse de un contrato de gestión de la refinería de Curazao, dijo Blanken, lo que habría puesto en peligro unos 8.000 puestos de trabajo.
El miércoles pasado, el general Carvajal fue arrestado en Oranjestad, capital arubana, pero fue puesto en libertad y regresado a Venezuela la noche del domingo después de que el gobierno holandés decidiera que estaba protegido por inmunidad diplomática, contradiciendo una decisión anterior de la Justicia aubana que indicaba que el general venezolano carecía de fueron al no haber sido confirmado como cónsul por el gobierno holandés.