El Banco Central proyecta mantener la flotación cambiaria administrada

Así lo definió en los lineamientos de política para 2014. Confía en que el balance comercial "continúe siendo el principal generador de divisas de la economía". Proyecta recuperación de reservas

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Juan Carlos Fábrega, presidente del Banco Central<br> Télam 162
Juan Carlos Fábrega, presidente del Banco Central<br> Télam 162

Los supuestos de política monetaria, financiera y cambiaria parecen no tener en cuenta el efecto de la fuerte sangría de la posición de reservas, pese a que la economía mantiene un alto superávit comercial, ingresaron fondos de acuerdos con petroleras y cerealeras e YPF sumó divisas colocando deuda en el resto del mundo.

El paper del que da cuenta la agencia Télam indica que el BCRA también prevé "una evolución favorable de las reservas internacionales", sobre la base de las compras netas de divisas, "que superarían a los pagos de deuda en moneda extranjera del sector público", según el documento del BCRA sobre Objetivos y Planes para este año.

La entidad evalúa que "en la actualidad, sin compromiso de mantener paridad cambiaria alguna, y dado el bajo grado de dolarización del sistema financiero, el régimen de flotación administrada del tipo de cambio brinda la flexibilidad necesaria para amortiguar shocks de diversa naturaleza".

A lo largo del tiempo –recuerda el Central– el tipo de cambio nominal evolucionó "en función de diferentes coyunturas: en algunas de ellas se permitió una mayor depreciación de la moneda local, mientras que en otras se requirió moderar la dinámica, incluso propiciando su apreciación".

El documento –uno de los primeros difundidos tras iniciarse la gestión de Juan Carlos Fábrega– advierte luego que la excesiva volatilidad del tipo de cambio puede resultar negativa en términos monetarios y financieros.

"La excesiva volatilidad puede ser negativa en términos monetarios y financieros"

Eventuales movimientos abruptos del tipo de cambio –alerta– pueden afectar las expectativas y debilitar la demanda de dinero, elevar la volatilidad de las tasas de interés y afectar al crédito, haciéndolo más caro, escaso y de menor plazo.

Por eso –se anticipa– el Banco Central "continuará interviniendo en el mercado cambiario de acuerdo con las necesidades del contexto macroeconómico", en coordinación con el resto de las políticas económicas del gobierno nacional.

Flujo de capitales

El documento defiende asimismo la "política macroprudencial" existente, que permite "morigerar el impacto de los flujos de capital (de residentes y no residentes) en la paridad cambiaria y en los resultados del sector externo".

Persistirá la política de desendeudamiento con uso de reservas

"En conjunto, estas medidas pretenden dar preferencia a la aplicación de las divisas a las operaciones vinculadas con la actividad productiva y la política de desendeudamiento, potenciando el impacto económico y social", dice el BCRA.

Para la autoridad monetaria, una "fortaleza adicional" es que, "a diferencia de lo ocurrido durante el régimen de convertibilidad, la acumulación de reservas internacionales se explicó por los excedentes comerciales, no por el endeudamiento externo".

Por el contrario, las reservas se emplearon para "apuntalar el proceso de desendeudamiento externo", explicó el Banco Central. A tal fin, resalta, "ya se emplearon 42.900 millones de dólares" desde 2005, cuando se dispuso la primera asignación específica de reservas para cancelar la totalidad de deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

De este modo, el total de

deuda del sector público en moneda extranjera en manos privadas representaba sólo 9,3% del producto en junio último, cuando en diciembre de 2003 equivalía a 75,4% del PBI

, concluye.