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El candidato a diputado bonaerense por el kirchnerismo, Martín Insaurralde, ratificó su intención de bajar la edad de imputabilidad a los 14 años como parte de un plan para combatir la inseguridad, a pesar de la serie de críticas que cosechó al interior de su propio espacio.
El intendente de Lomas de Zamora quedó en el ojo de la tormenta tras anunciar que impulsaría un proyecto para modificar el régimen penal juvenil, cuyo límite para aplicar penas es de 16 años, por uno especial que contemple a los jóvenes de 14 años. Pero tanto desde la oposición como desde las filas kirchneristas se oyeron voces en contra, o, en el mejor de los casos, no brindaron el apoyo suficiente.
"No estamos discutiendo la edad. Estamos discutiendo un régimen penal juvenil que contemple un proceso justo para que a los jóvenes se los pueda contener", se defendió el autor de la iniciativa. Sin embargo, varios referentes del kirchnerismo se manifestaron en contra y ya anticiparon que no lo votarían. Uno de ellos, quizás el más claro a la hora de rechazarlo, fue el diputado Carlos Kunkel, quien sostuvo que el alfil de la Presidente estaba "mal asesorado". Otra figura del kirchnerismo duro que se manifestó en contra fue la jefa del bloque K en Diputados, Juliana Di Tulio, quien trató de bajar el impacto negativo del proyecto: "El Frente para la Victoria no está discutiendo la baja de edad de imputabilidad, lo que está discutiendo es el régimen penal juvenil", aclaró.
Sin embargo, Insaurralde se esfuerza en recordar que lo que impulsa en realidad es retomar un debate que ya se había dado en el Congreso. Se trata de una iniciativa que obtuvo media sanción en el Senado en 2009, con el apoyo de casi todo el bloque kirchnerista con 41 adhesiones, a excepción de la senadora por La Rioja Teresa Quintela. Sin embargo, en Diputados el proyecto fue descartado en comisión. Se intentó darle un giro en pos de establecer un sistema penal específico, privilegiando la defensa de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, pero todo derivó finalmente en que la iniciativa perdiera estado parlamentario.
"El kirchnerismo ya lo votó en 2009. Estamos discutiendo la forma. Lo importante es cómo insertamos a los jóvenes en la sociedad, lo expliqué muchas veces. Son pocos los jóvenes que cometen delitos graves, pero hay que contenerlos", explicó el candidato al diario La Nación.
Lo cierto entonces, es que a pesar de la falta de apoyo, Insaurralde insistirá y lo llevará al parlamento. "Yo estoy dando el debate por lo que pienso y quiero ir al Congreso a debatirlo el 10 de diciembre", ratificó.