¿Qué le puede enseñar San Martín a un empresario?

Una consultora hace coaching para ejecutivos en alta montaña donde estudian al Gran Capitán como modelo de líder y CEO."Tenía grandes pensamientos y los realizaba", dijo a Infobae el organizador de estos cursos a caballo 

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La cordillera de Los Andes, que fue escenario de las hazañas de San Martín, hoy lo es de un seminario muy particular que brinda la consultora Orion, basada en Rosario, y especializada en servicios a empresas de seguros. Durante cinco días, a lomo de mula y durmiendo en carpas, un grupo de ejecutivos del sector participa de un coaching basado en el sistema y los valores sanmartinianos.

"No necesitamos modelos de afuera", dice Víctor Hugo Rodríguez, el responsable de la coordinar estos entrenamientos en los que los empresarios aprenden liderazgo estudiando al Libertador, su método de acción y, sobre todo, sus virtudes.

"San Martín fue un gran CEO desde el punto de vista del liderazgo. Los modelos extranjeros, los damos también, pero no me van a venir a enseñar el compromiso ético y moral, el compromiso espiritual, eso lo tenemos en él", sostiene con apasionamiento Rodríguez, quien, además de dedicarse a brindar servicios a compañías de seguros desde hace más de 20 años, es veterano de la Guerra de Malvinas, donde combatió y fue condecorado.

Aunque militar –era teniente primero cuando fue a Malvinas y se retiró del Ejército como teniente coronel- no es ése el aspecto que más destaca de la trayectoria de San Martín. "Nosotros organizamos estos cruces de los Andes con un fin pedagógico cultural que va mucho más allá del aspecto militar; el general San Martín vale mucho más de a pie que a caballo. No nos interesan las batallas porque estuvo 15 minutos combatiendo en San Lorenzo y 4 horas en Maipú; son una maniobra enana al lado del gigante ético y moral y de liderazgo que fue este hombre que, en el medio de la nada, en el desierto que era Cuyo en aquel momento… pensemos que San Luis tenía 7 mil habitantes, Mendoza otro tanto y San Juan mucho menos, logra formar un ejército de 5000 hombres, reunir 20 mil mulas 1200 caballos…."

¿Cómo pudo hacerlo?

"Porque él llevaba la idea en sí mismo, dice Rodríguez, y el pueblo advirtió en él un nivel ético y espiritual tan grande, que lo acompañó y lo siguió. San Martín lo que tuvo fue sobre todo un gran compromiso, no tuvo incongruencias, no hay desorden en su vida personal, nunca un hecho de vandalismo de los hombres bajo su mando; todo lo contrario, hay un aspecto de orden y el orden lo llevó adelante con su tropa y con su pueblo y lo llevó adelante como general pero también como político".

Ese compromiso debe estar presente también en las empresas, dice Rodríguez, porque "es natural que el líder tenga un gran compromiso". "Sabiéndose líder, San Martín cuidaba con un nivel de artesanía milimétrica su actitud personal. Y el empresario tiene que hacer lo mismo si quiere que lo sigan sus hombres".

"Pero fundamentalmente –agrega- San Martín vale porque dio pasos atrás, porque realmente se venció a sí mismo".

Otra clave de su liderazgo fue que todo lo que ordenaba a sus hombres estaba dispuesto a ejecutarlo él mismo. Es la esencia de la autoridad. "Es un aspecto trascendente: que el líder sea uno más, el jefe debe estar adelante, el General San Martín no ejercía el liderazgo desde un escritorio", afirma el coordinador de los seminarios de Orion.

"Ser empresario no es andar con aspecto de yuppies, dice Rodríguez, quien también preside la Asociación Cultural Sanmartiniana de Rosario. ¿Dónde están los grandes empresarios que nos traían la teoría del yuppy, la generación Y, ¿qué es la generación Y? ¿La generación sin compromiso? La que dice '¿y a mí qué me interesa?' Está condenada al fracaso porque no tiene compromiso con la empresa; la generación Y es una cuestión de moda que venden las grandes consultoras".

En los cursos, dice Rodríguez, "fundamentalmente lo que les damos es doctrina y ética sanmartiniana desde el punto de vista del empresariado, rescatamos los principios y valores que debe tener un hombre que quiere ser un líder, los códigos, la conducta. San Martín hacía lo que decía. Tenía grandes pensamientos: voy a cruzar los Andes, voy a ir al Perú, voy a ponerme a las órdenes de Bolívar. Y lo hacía. Por eso exponemos la gesta sanmartiniana como ejemplo de una pasión, una comunión de esfuerzos, un sacrificio al servicio de una empresa".

¿Qué otros valores de la acción sanmartiniana pueden ser útiles a un CEO?

"Enfrentar con fe los desafíos inconmensurables, reunir las fuerzas para ello, confrontar el nivel de planeamiento, organización y control que tenía la gesta sanmartiniana y que debe tener una empresa, afianzar la interrelación entre los funcionarios de la empresa, acrecentar la voluntad de vencer que debe tener una empresa ante los grandes problemas; los fracasos son perdonables pero la falta de creatividad y acción no", enumera.

      

"Los ejecutivos que asisten a estos cursos, aclara Rodríguez, ya han concurrido a grandes seminarios nacionales e internacionales pero les llama la atención el altísimo nivel que proponemos desde el punto de vista de la doctrina, que ya mencioné, y de la acción, porque en el medio de la montaña bajan las mulas de carga con todo el material y una logística impresionante que desplegamos para estos seminarios de liderazgo en alta montaña, a los que invitamos a las empresas de seguros con las cuales trabajamos".

Por ejemplo, ya han concurrido a este cruce de los Andes ejecutivos de empresas como SanCor seguros, San Cristóbal, Mercantil Andina, Rivadavia, Río Uruguay, entre otras muchas. "Nos envían a sus equipos y nosotros los formamos, explica Rodríguez. Son 5 días, 4 a caballo, más un curso de rafting (info@crucedelosandes.com.ar). Los funcionarios se suben a los botes creyendo que es un paseo pero a cada uno le creamos un ejercicio, un conflicto, a ver cómo lo resuelven".

Por último, este admirador profundo de la personalidad de San Martín se lamenta de que en la escuela se enseñen "las 10 horas de batalla y no la grandeza de espíritu, el renunciamiento a la gloria, al dinero y al poder, y el sobrellevar todas las ignominias, las mentiras y las calumnias con resignación cristiana".