Los superhéroes fueron protagonistas de las series desde los inicios de la televisión: desde Tarzán pasando por La mujer maravilla hasta Batman y Robin, estos hombres con capacidades especiales siempre llamaron la atención de la audiencia. Pero en lo últimos años estos personajes nos mostraron su lado más humano: tienen, en su mayoría, pasados oscuros, infancias dramáticas, temores irresueltos y una vida diaria compleja. Pero mantienen la idea de la búsqueda de justicia y de equidad en el mundo y, también, no abandonaron la lucha por los derechos de lo que menos tienen.
Jessica Jones es una superheroína femenina que trabaja como detective privada. Tiene la capacidad de la fuerza extrema y sobrevive con la culpa de la muerte de sus padres y su hermano en un accidente automovilístico. Mientras tanto lucha contra un supervillano que maneja la mente de las personas y, a su vez, es su exnovio. Durante los embates por la justicia, Jessica conoce a un "bartender", Luke, con quien comienza un vínculo sexual y también amoroso.
El personaje de Luke ganó tanta aceptación por el público que decidieron realizar un spin off con su héroe. Luke Cage es la nueva apuesta de Netflix al mundo Marvel-debemos sumar a Dardevil, Flash, Jessica Jones-que llega el 30 de septiembre. Interpreta a un hombre con piel irrompible: no lo atraviesan las balas, ningún corte de cuchillo puede con él. Pero también guarda una historia trágica sobre su esposa e hija.
Arrow está basada en el cómic DC. Flecha Verde y cuenta la historia de Oliver, un multimillonario que sobrevive de un naufragio y reaparece luego de 5 años. Esta experiencia traumática provoca en Oliver la necesidad de alejarse de la frívola de su mundo y crea el personaje de un justiciero encapuchado. Su personaje hizo crossover con su serie amiga de rubro The Flash.