El detenido en Corrientes por el golpe millonario en Ciudad del Este es argentino

Esta tarde, el Ministerio de Seguridad comunicó una de las capturas más interesantes de los últimos tiempos: Gendarmería Nacional había apresado en Ituzaingó, provincia de Corrientes, a uno de los presuntos involucrados en el espectacular robo a la firma Prosegur en Ciudad del Este, Paraguay, ocurrido el 24 de abril pasado, con un botín de casi doce millones de dólares y un policía paraguayo muerto. El detenido había sido encontrado mientras intentaba fugarse en lancha, luego de varios días de inteligencia a cargo de Gendarmería, que lo encontró refugiado en un hotel de la zona.

Su captura había sido una cuestión de Estado. Los días 9 y 15 de este mes, el comisario Alberto Duré Ríos de la Jefatura Policial del Alto Paraná y la fiscal Liliana Duarte enviaron oficios al Gobierno argentino afirmando que el presunto partícipe del robo a Prosegur se encontraba en territorio argentino de acuerdo a datos del Sistema de Inteligencia Policial de Paraguay, luego de entrar al país eludiendo los controles migratorios. La extradición, en caso de captura, debería hacerse efectiva de inmediato.

El nombre del detenido, por otra parte, fue un secreto celosamente guardado. Infobae lo supo a través de fuentes judiciales; el diario ABC Color en Paraguay lo corroboró por fuentes de inteligencia de la policía de su país. Es Néstor Ariel Palma, un comerciante de 43 años de edad. El hombre, sorprendentemente, no es paraguayo, o brasileño: es argentino, con domicilio legal fijado en Capital Federal y familiares en la zona sur, pero naturalizado en Paraguay hace varios años.

Palma había estado involucrado en un caso de estafa en febrero de 2011 en Ciudad del Este, luego de una denuncia que había formulado contra un comerciante libanés. La denuncia luego se volvió en su contra y terminó imputado él mismo. Tres años después, una playa de estacionamiento que controlaba fue el centro de otra polémica desagradable: el lugar habría sido usado por un fiscal como frente para lavar dinero de coimas.

Sin embargo, estas no son las acusaciones más aterradoras en su contra. Autoridades argentinas hablan de un vínculo directo con el temible grupo que se atribuyó el robo a Prosegur: el PCC, el Primeiro Comando da Capital do Brasil, fundada en Sao Paulo por presos y con fuertes operaciones por todo el Paraguay, acusado de violentos robos y narcotráfico.

Clarín publicó semanas atrás un artículo sobre la posible presencia del PCC en Corrientes en base a reportes oficiales. La ministra Bullrich minimizó el dato. Sin embargo, la detención de Palma da otra dimensión al informe. El argentino, según el periódico ABC Color de Paraguay, es el propietario de la vivienda en el barrio San José de Ciudad del Este que fue allanada un día después del asalto a Prosegur como supuesto aguantadero: se sospecha que había dado refugio a miembros del PCC.

El Ministerio de Seguridad, en su comunicado que anunció la captura, habló de su vínculo con el "barón de la droga" de Ciudad del Este. Ese "barón de la droga" es un brasileño, el célebre Jarvis Chimenes Pavao, un genuino capo de la droga oriundo de Ponta Porá. Chimenes Pavao llegó a tener fastuosas mansiones y una mini-flota propia de aviones para mover droga, con proveedores de marihuana apostados en Pedro Juan Caballero, la principal zona productora de hierba del país vecino. Se cree que el PCC controla aeropuertos en la periferia de Pedro Juan Caballero, con capacidad de enviar veinte vuelos mensuales cargados de marihuana y cocaína.

Varias autoridades observan el corredor narco de distribución de marihuana que atraviesa todo el Litoral con sumo recelo de cara a la cercanía y las alertas por el PCC en territorio argentino. Fuerzas de seguridad como la Policía de Seguridad Aeroportuaria están en alerta. Ya existiría, por otra parte, un informe oficial sobre el PCC que habría sido elevado al Ministerio de Justicia, algo que fuentes cercanas al ministro Germán Garavano niegan.

La captura y extradición de Palma dependen, por otra parte, del juez federal correntino Carlos Soto Dávila. Este juez, irónicamente, enfrentó fuertes cuestionamientos: organismos como la Procuraduría de Narcocriminalidad presentaron quejas en su contra por beneficiar con excarcelaciones y lentitud en investigaciones a los narcopolíticos de Itatí, que tienen a la marihuana paraguaya como principal comercio.

¿Cómo entró Palma a la Argentina? La investigación de Gendarmería reveló que entró por la puerta grande. El acusado de participar en uno de los asaltos del siglo, vinculado a uno de los capos narco más poderosos y a una de las bandas armadas más sanguinarias del continente, no se escabullió entre la selva y cruzó arroyos y zanjas llenas de barro para ingresar a la Argentina. Llegó, desde Uruguay, al Aeroparque porteño. De ahí, tomó un micro hacia Misiones, para finalmente refugiarse en Corrientes, donde Gendarmería lo capturó.