"En la sociedad hay una actitud tolerante frente a la violencia de género"

—¿Cuáles son los obstáculos con los que ustedes se encuentran cuando tienen que dictaminar o sentenciar sobre casos de femicidios?

Fernando Ramirez: En general cuando a nosotros nos llega como tribunal de juicio una causa para esto, en general ya han sido superados los obstáculos más importantes. Tienen que ver con ciertas cuestiones de penosa empatía que se va dando en quienes llevan adelante una investigación de estas características. Y esto es difícil, a veces, de detectar. Hay como cierta actitud de tolerancia frente a ciertas conductas que no se explicitan, en el caso concreto que nos tocó a nosotros de Mangieri, hasta el momento del juicio ninguno de los vecinos había mencionado hasta que no se le preguntó en juicio, las conductas que en general tenía este hombre con respecto a las mujeres que trabajaban en las casas o vecinas. Esto pasaba desapercibido.

—Esto doctor me hace pensar que es un tema cultural de la negación de la figura.

F.R.: En el mejor de los casos, es negación de la figura.

—Doctor Báez, ¿cuál es su experiencia con esto?

Julio César Báez: Tenemos una cuestión de modelos patriarcales que está intrincado en nosotros. El doctor Ramírez, que hace bastante viene bregando por esto, es uno de los que ha intervenido en la creación de la oficina de violencia doméstica con todas las respuestas que ha dado a la sociedad donde ya hay un lugar definido para evitar la ruta o el itinerario de la víctima buscando que oficina les puede dar respuesta. Tenemos una cultura patriarcal que viene desde el arco del tiempo, donde había una asignación de tareas propias del hombre que era la casa y la actividad rudimentaria y la mujer comenzó a quedarse relegada a los espacios de la crianza o establecida en el marco de contención de su familia. No nos olvidemos de Simone de Beauvoir: "mujer no es, se llega a serlo". Fijémonos en las manifestaciones tan extremas que hemos tenido para determinar hacia un lugar donde llega la mujer y dónde hay que colocarla. Creo que es una lucha entre todos: de varones y mujeres estar nivelados en todos los aspectos. Nivelados en el acceso a la justicia, en la protección, en la interacción, nivelados en que no haya un techo de cristal que hace que las mujeres lleguen, pero hasta determinado lugar como forma de satisfacción. Tenemos que estar en un pie de paridad y cuando tenemos investigaciones en materia de violencia de género, como dije antes, el femicidio, tal vez la manifestación más extrema, tenemos que tener una mirada de esta desigualdad propia del arco del tiempo y que los operadores empecemos a mirar la cosa con una mirada de género. Todos tenemos que construir una justicia mejor, y una manera es hacerlo teniendo una mirada de género.

La entrevista completa: