Aportantes, millones y particularidades del financiamiento del primer tramo electoral

Compartir
Compartir articulo
Télam
Télam

Poco más de $90.200.000. Es lo que gastó el macrismo, en blanco, en todo el país para las PASO de agosto, según los informes financieros de todas las provincias que Cambiemos presentó ante la Justicia Electoral, con excepción de Corrientes, Santa Cruz y Formosa, que al cierre de esta nota aún no había información disponible de los gastos e ingresos de la alianza oficialista en dichos distritos.

El gasto más significativo se dio en la campaña bonaerense: $59 millones de egresos para ambas categorías, senadores y diputados. En la ciudad de Buenos Aires, el apuntalamiento de la candidatura de Elisa Carrió demandó $10 millones. Las otras cuatro campañas más costosas, según los balances presentados en la Justicia, fueron las de Córdoba, Santa Fe, Mendoza y Tucumán. En esos distritos, la alianza Cambiemos gastó en las PASO $3.907.031, $3.146.633, $2.841.155 y $2.382.361, respectivamente. Con una particularidad: en varias provincias, los gastos y los ingresos fueron casi idénticos. Una genialidad de los contadores.

Más allá de los montos, el análisis de los informes presentados por Cambiemos y por la oposición desnudan una serie de particularidades en varias de las provincias.

En la provincia de Buenos Aires, el mayor aportante al oficialismo fue la familia Rodríguez, que integra la cúpula de la empresa Sinteplast San Luis. Entre todos aportaron $1.080.000 a las campañas de Esteban Bullrich y de Graciela Ocaña: ocho donaciones de $135.000.

En el caso de Unidad Ciudadana, los mayores aportes a la lista de la ex presidenta Cristina Kirchner fueron de $100.000, de parte de los empresarios Alan y Héctor Abel Ferreyra, y de un jubilado -según los registros sin mayor solvencia económica- de apellido Garamendy. En el caso de diputados, la mayor contribución fue de un joven de 27 años de apellido Allignani que hizo tres aportes por un total de $285.000. La primera responsable económica de Unidad Ciudadana es Marianela Páez, una joven de 30 años que asesora al concejal platense Gastón Castagneto, que integra el bloque del Frente Para la Victoria, hijo del diputado K.

La campaña del ex ministro Florencio Randazzo solo tuvo cinco aportes privados de personas físicas que contabilizaron $195.803. En diputados, a la lista encabezada por el intendente Eduardo Bucca, la mayor contribución fue de $200.300, aunque no está identificada.

La alianza de Sergio Massa y Margarita Stolbizer tuvo muy pocos aportes en comparación con Cambiemos y Unidad Ciudadana, y casi todos fueron de dirigentes del espacio. La donación mayor fue la del diputado José Ignacio de Mendiguren: $210.000. Lo siguieron Mario Meoni, Nicolás Russo, Sebastián Galmarini y Daniel Arroyo, entre otros.

Entre los ganadores de las PASO se encuentra el empresario Valentín Reinaldo Luis Bueno, uno de los preferidos del macrismo, del rubro de la publicidad en la vía pública. Su empresa, Latin American Communication, embolsó $665.938 en el primer tramo de la campaña bonaerense. En la ciudad de Buenos Aires fueron más generosos: desde el búnker que postula a Carrió le pagaron, según los informes financieros, $838.970. En Entre Ríos también fue proveedor: $379.000 por campaña en la vía pública. Entre el segundo semestre del 2016 y el primer semestre de este año, Bueno obtuvo de la Jefatura de Gabinete $69.913.042 en publicidad oficial nacional y $52.334.350 en pauta internacional.

En la ciudad de Buenos Aires, la alianza oficialista Vamos Juntos no presentó gastos en encuestas o investigaciones de mercado: "$0" informaron a la Justicia Electoral. Un imprevisto ahorro si se tiene en cuenta la devoción del PRO por los números. En el primer tramo electoral, ninguno de los dirigentes de la Coalición Cívica aportó a la campaña de Carrió. Sí lo hizo gran parte del gabinete porteño, por ejemplo, candidatos del PRO y legisladores. Desde la CC, que vetaron a algunos aportantes resbalosos, prometieron contribuir, previa toma de préstamos personales, para las generales del 22 de octubre.

En Santa Cruz, sumida en una crisis social, político y económica, la gobernadora Alicia Kirchner fue la mayor aportante al Frente Para la Victoria. Donó $21.000 a la lista de senadores encabezada por Ana María Ianni y el mismo monto a la campaña de Juan Vázquez. Otro de los que aportó al kirchnerismo santacruceño fue Roberto López, ex director de Lotería Nacional, cuyo paso por ese organismo estuvo teñido de sospechas. Ahora dirige Lotería de Santa Cruz: fue otro de los ex funcionarios K que buscó refugio en la administración de la ex cuñada presidencial. López, que se construyó una mansión en El Calafate y que, como publicó Nicolás Pizzi en noviembre del año pasado en el diario Clarín, ocultó bienes en un country de la localidad bonaerense de Campana, tuvo de todos modos un rol más relevante durante la campaña: es uno de los responsables económicos de la alianza K en esa provincia.

Sin embargo, una de las particularidades más notables de la primera vuelta electoral se dio en Entre Ríos, distrito en el que talla el ministro Rogelio Frigerio. Allí, Cambiemos gastó poco más de $1.700.000 para apuntalar la lista que encabeza Atilio Benedetti. Uno de los mayores gastos en "publicidad electoral" se utilizó la "impresión de pasacalles y lonas". Para ese rubro, Cambiemos contrató, según el informe financiero, a Maximiliano Pullaro, el ministro de Seguridad de Santa Fe. Es decir, el macrismo le pagó $218.335 al funcionario santafecino, que trabaja en el gobierno socialista pero que, según parece, hace changas en el sector privado. "Fueron los mejores precios que conseguimos en la zona", explicaron desde el oficialismo provincial.

infobae