El principal indicador bursátil de la bolsa estadounidense, el índice Dow Jones, a la fecha cotiza en niveles históricos de 18.500-18.600 puntos; acumula, en lo que va del presente año 2016, una ganancia cercana al seis por ciento. Si bien aún restan cuatro meses operativos para finalizar el año 2016, no es un dato menor que este mercado haya crecido en los últimos ocho años, más precisamente desde el piso conseguido tras la crisis subprime, en el mes de marzo del año 2009, un 285% de su valor. Sin embargo, a pesar de la magnitud del avance acumulado, resulta llamativo que no logre apreciarse un síntoma de euforia en este mercado e incluso que el volumen operativo haya sido decreciente a lo largo de los últimos ocho años.
En efecto, resulta interesante observar la siguiente gráfica del índice Dow Jones, que nos muestra la caída del volumen operativo que ha sufrido este mercado, al pasar de operar en niveles promedio de 60 mil millones de dólares anuales entre el año 2000 y el año 2009, para operar actualmente en promedio de 20 a 25 mil millones de dólares anuales. Es decir, a pesar de que en los últimos ocho años el índice ha logrado una apreciación del 285% en su valor, el volumen de negociación de este mercado disminuyó a su tercera parte.
Gráfica con dow jones anual
La pregunta que surge de este dato: ¿Podemos considerar que la bolsa estadounidense se encuentra inmersa en una burbuja, si tenemos en cuenta que este volumen operativo es actualmente el más bajo de la última década y media?
Por cierto, las burbujas financieras, también conocidas como burbujas especulativas, suelen tener la característica de mercados con avances anormales y de pendientes más bien verticales, con un convencimiento generalizado de los participantes sobre la tendencia en curso, aun cuando los precios de los activos se alejan por mucho de su valor real. La euforia de los participantes, el crecimiento continuo de los precios y el ingreso constante de flujo, muchas veces a partir de apalancamiento, suelen ser condimentos bases de cualquier burbuja especulativa. Sin embargo, no es esto lo que se aprecia actualmente en la bolsa estadounidense. Por el contrario, se observa un mercado que, a pesar de encontrarse navegando en niveles históricos, muestra un comportamiento apático, con volumen decreciente y las expectativas de muchos participantes puestas principalmente en reconocer cuándo llegará la próxima crisis, lo que se aleja de este modo de las características de techo de burbuja.
El análisis
Como hemos venido advirtiendo a lo largo de los últimos meses, en otros análisis, desde esta misma columna, técnicamente la bolsa estadounidense permanece en tendencia alcista y si bien se observa cierto cansancio en su comportamiento de avance, lo cierto es que no contamos actualmente con señales concretas que nos adviertan que este mercado se encuentra en zona de techo de importancia. Obviamente que siempre que un mercado crece con los niveles porcentuales antes mencionados podemos estar alertas ante la habilitación de un desarrollo correctivo temporal, sin embargo, difícil pensar que estemos próximos a un cambio de tendencia de mediano a largo plazo para este mercado con las condiciones actuales.
En cuanto a los parámetros técnicos para el índice Dow Jones, nuestra atención estará centrada en el soporte de 18.300-18.000 puntos, que es la zona que actuó como contención alcista o resistencia durante el último año operativo. De sostenerse los precios por encima de esta zona, podremos estar expectantes de una continuación alcista directa en este mercado, inicialmente en busca de instancias de 19 mil puntos y más tarde, el objetivo psicológico de 20 mil puntos.
Gráfica de dow jones semanal
Solamente caídas debajo de los 18 mil puntos nos pondrían en estado de alerta, no para considerar la posibilidad de un cambio de tendencia en este mercado, sino para contemplar el desarrollo de un proceso correctivo mayor hacia las próximas semanas, quizás en busca de un regreso del índice hacia instancias de 16.500 puntos, o bien la zona de mínimo del pasado año 2015, en torno a los 15.500-15.200 puntos, para que recién desde allí la tendencia alcista en curso desde el año 2009 continúe su desarrollo y que finalmente se consiga el objetivo psicológico de los 20 mil puntos de índice.
@Ullua
El autor es analista de mercados financieros, especializado en análisis técnico desde 1996, tanto para el mercado de valores como de commodities. Director de la consultora Ruben J. Ullúa.