Inicialmente la chica sólo planeaba hacerse un tatuaje en el brazo, pero después de conocer al tatuador Coen Mitchell se volvió adicta. Según el sitio 9 Gag la chica pasó un total de 15 días en la silla de Mitchell, y cuando volvió a casa se había convertido en una obra de arte andante.
"Cuando Coen terminó mi tatuaje del brazo me encantó y sentí que era algo muy diferente. Casi inmediatamente quise tatuarme algo más y tuve suerte de que él tuviese ideas tan geniales para la parte superior de mis piernas y mi cola".
Lentamente el cuerpo de Summer comenzó a verse más y más cubierto de tatuajes y pronto ya no era sólo su brazo: en su estómago y pecho también habían tatuajes.
Summer se volvió muy famosa en la red gracias a estas fotografías de su cuerpo tatuado. La chica planea completar ciertas áreas de su cuerpo que no tienen tatuajes, en especial sus piernas y posiblemente también su garganta.