Susto en Málaga: una multitud pensó que se había producido un ataque terrorista y provocó una estampida

Rumores de un ataque terrorista pasadas las 02:00 a. m. (GMT +2) en la multitudinaria procesión de Nuestro Padre Jesús Cautivo, en Málaga, al sur de España, provocó histeria colectiva entre los asistentes y una avalancha que dejó a dos heridos.

Al parecer, una pelea entre varios jóvenes mientras se desfilaba el trono del Cautivo y la Virgen de la Trinidad como cada Lunes Santo, desencadenó en versiones de un atentado que despertó una crisis de pánico en el centro de la ciudad. 

"Al principio era una pelea entre dos o tres jóvenes, pero en cuestión de segundos empezó a sumarse más y más gente, y eso hizo que se creara una situación de pánico que se extendió rápidamente. Ha sido todo muy rápido, apenas nos hemos podido dar cuenta de lo que estaba pasando", explicó un testigo, Daniel López, al Diario Sur.

Otro testigo contó que la gente salió corriendo en todas las direcciones e incluso perdía sus pertenencias y, en algunos casos, a sus hijos: "A los músicos se les iban cayendo los instrumentos. Otros presentes incluso aseguran que había hasta teléfonos móviles tirados por el suelo y la gente ni se detenía a cogerlos. Varios niños se perdieron, aunque fueron encontrados al poco tiempo por sus padres".

Más de 100 personas se refugiaron en la Jefatura de la Policía Local y otros varios se alojaron en los locales y restaurantes de la zona y se negaban a salir. "Intentamos convencerlos de que salieran, de que no había ningún atentado, pero no había forma", aseguró un agente policial que intentaba normalizar la situación.

"La única forma de lograrlo fue decirle a la banda de música que volviera a tocar para que comprendieran que la procesión continuaba y que todo volvía a la normalidad", agregó.

Dos jóvenes presionados por la estampida intentaron saltar una valla metálica y terminaron heridos. La chica sufrió contusiones en las piernas, mientras que su acompañante había recibido un fuerte golpe en el brazo y presentaba un profundo corte en el muslo. Ambos fueron atendidos en el Hospital Clínico. Por otro lado, varios espectadores se desmayaron por la ansiedad y otros padecieron intensos ataques de pánico.

El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Málaga, Mario Cortés, narró los hechos detrás del incidente. "La gente, fruto de la histeria colectiva de los momentos en que vivimos, tiene miedo y aquí se produjo una idea equivocada, hubo comentarios desafortunados y la sensación es que pasaba algo".

El festival se reanudó luego de 20 minutos de interrupción, aunque gran parte de los asistentes no regresaron a la escena. Según la Policía Local, en el momento del encierro, al final de la celebración, el número de participantes se había reducido por un tercio con respecto al año pasado.

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