Empezó a nadar en el mar para huir de la Policía, y terminó siendo "perseguido" por algo mucho peor

Estaba en su auto cuando lo detuvo la Policía. Un oficial le pidió que bajara la ventanilla y comenzó a interrogarlo. Entonces vio un paquete que le resultó sospechoso.

Al darse cuenta de que iba a terminar arrestado, Zachary Kingsbury se bajó del vehículo y empezó a correr en dirección a la playa de Surf City, Carolina del Norte. En su desesperación por escapar, se metió en el mar.

Nadó más de un kilómetro cuando notó que ya no era un policía lo que tenía detrás, sino algo mucho peor: un tiburón. La escena fue captada por un drone desplegado por la fuerza para encontrarlo.

Desde ese momento, lo que era una persecución se convirtió en un rescate. Tras un operativo que duró dos horas, del que participaron la Guardia Costera y el Departamento de Bomberos, lograron sacarlo del agua.

Entonces sí lo arrestaron. Está acusado de contrabando y podría ser condenado a varios años de prisión.

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