El delantero de 28 años, Yasmani Duk, declaró ante un medio local que el golpe, el cual dejó a Neymar ensangrentado en el suelo, fue involuntario y se defendió diciendo: "a mí me quebraron la nariz y no dije nada".
"A seguir, que no fue nada. Sólo una cicatriz", el brasileño, no se sumó a la polémica y sólo se limitó a publicar una foto en su cuenta de Instagram con esa frase.
"Neymar se venía sobrando a todos en el partido, pero mi intención sólo era de cortar una jugada, como se debe en el fútbol. Todo el mundo sabe que este deporte es así, a mí me quebraron la nariz y no dije nada", se justificó el boliviano.
A pesar de las impactantes imágenes, el futbolista del New York Cosmos de Estados Unidos, no fue sancionado y podrá jugar ante Paraguay en la próxima fecha de eliminatorias.
"Para ser el mejor jugador del mundo, él tiene que dejar de ser canchero y respetar a sus rivales", insistió el jugador, en base al desempeño del brasileño dentro del campo.
"El fútbol es de contacto, voy a tratar de quitarle el balón porque vengo leyendo la jugada, él quería hacerme un túnel y entonces abrí el brazo. No me di cuenta del codazo, nunca he sido malintencionado, pero lastimósamente se dio así", detalló.
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Neymar volverá a Barcelona para sumarse a los entrenamientos del club, de cara a su próximo encuentro de Liga, tras quedar fuera de los once que se enfrentarán a Venezuela, por acumulación de tarjetas.