Crece la presión internacional contra Venezuela por la liberación de Braulio Jatar, a más de tres meses de su detención

El pasado 3 de diciembre se cumplieron tres meses de la detención del periodista chileno-venezolano Braulio Jatar. Familiares, periodistas, dirigentes de la oposición venezolana e incluso distintos organismos internacionales exigieron al régimen de Nicolás Maduro la liberación inmediata del comunicador.

Human Rights Watch (HRW) fue una de las organizaciones que se pronunció al respecto. José Miguel Vivanco, director ejecutivo de la división de las Américas, instó a Chile y al Vaticano a unirse para presionar al chavismo para que libere al periodista.

Recientemente HRW lanzó una campaña para impulsar la liberación de los presos políticos, entre ellos Jatar, a través de las redes sociales con el hashtag #FreeThem.

El Centro Knight, de la Universidad de Texas, también se hizo eco del caso del periodista chileno-venezolano. El pasado 30 de noviembre publicó un artículo en su blog "Periodismo en las Américas" con declaraciones de Ana Jatar, hermana del preso político del chavismo.

"La detención como tal de mi hermano no comienza sino 72 horas después cuando se le presenta por primera vez ante un tribunal, y finalmente se entiende cuál es la acusación de la fiscalía [que] fue legitimización de capitales", manifestó Ana al Centro Knight.

La hermana de Jatar denunció que después de que las autoridades chavistas investigaron todas las cuentas bancarias del periodista "no encontraron ni una sola evidencia" de que pudiese tener 25 mil dólares en efectivo.

Sin embargo, el comunicador permanece en prisión.

El momento en que Nicolás Maduro es rodeado por manifestantes en Margarita

La última imagen del preso político fue publicada el mes pasado por su hija Claudia y su esposa Silvia Martínez. En la misma se lo puede observar sin cabello y físicamente deteriorado.

Sus problemas de salud aumentan, mientras las autoridades chavistas no le brindan las atenciones que requiere. El último parte médico, presentado por la defensa, señala que Jatar sufre de un "presuntivo carcinoma baso celular, lesión oncológica (cáncer de piel) que sin tratamiento adecuado puede propagarse a otros tejidos y crecer en los músculos y huesos".

"Esto es muy serio. Ya esto no es un tema político, es un tema humanitario", apuntó Ana.

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"Las pastillas de vitamina D que la familia y yo personalmente traté de hacerle llegar no se las dejaron pasar a la esposa porque supuestamente esas pastillas de vitamina D no habían sido parte de una [receta] médica. Aunque su falta de vitamina D es obvia", agregó, al mismo tiempo que denunció que "las cárceles venezolanas no son cárceles, son centros de tortura".

Mientras las autoridades chavistas siguen sin poder encontrar pruebas para demostrar la culpabilidad de Jatar por lavado de dinero, sus familiares y la comunidad internacional acusan al régimen de Maduro de detenerlo luego de la divulgación de un video en el que aparece el presidente corriendo en medio de una multitudinaria protesta en Margarita.

A más de tres meses de su detención, el caso judicial sigue sin avanzar. Hasta el momento no se realizó la audiencia en la que se le imputan oficialmente los cargos. Mientras tanto, la salud de Jatar empeora. "La salud de mi esposo es una bomba de tiempo en manos del gobierno", aseguró Silvia Martínez, su esposa, en diálogo con el diario El Nacional.