Dybala, íntimo: su idolatría por Román y el contraste de querer ser el mejor del mundo y no tener preocupaciones

El goleador de la Juventus hizo un repaso de lo que fueron sus inicios hasta la consagración en Italia. "Cuando tenía cinco años dije que quería ser el mejor jugador del mundo y todos se reían", recordó el cordobés. Y en contraposición, admitió: "A veces también me gustaría ser como mis amigos y no tener preocupaciones"

Compartir
Compartir articulo
infobae

Paulo Dybala se convirtió en una de las figuras de Europa. Su gran presente y prometedor futuro no deja de deslumbrar a propios y ajenos. Tal es así que no sólo en Italia se rinden a sus pies, sino también en España. Tal es así que el reconocido periódico El País le realizó una extensa entrevista en la que repasó su corta y exitosa carrera desde sus inicios en Instituto.

"En Instituto aprendí a no ser egoísta, a limpiar las habitaciones, a poner la mesa, a levantarte a por tu plato y tu vaso de agua. Cada vez que vuelvo a Argentina me junto con algunos de los compañeros que tuve allí", relató el goleador de Juventus. Y agregó: "No fue fácil alejarse de casa y superar la perdida de mi papá. El fútbol me ayudó a seguir adelante. Lo hice más por mi papá que tenía el sueño de que yo fuera futbolista que por mí porque muchas fuerzas no me quedaban. Nunca imaginé estar donde estoy hoy, me dio una mano muy grande".

Mientras que enseguida se refirió a su desembarco en el Viejo Continente: "En Europa me costó adaptarme al trabajo físico. El roce con los rivales es lo que más me costó, tuve que trabajar mucho en el gimnasio, también para esquivar patadas y los choques. No estaba acostumbrado".

"Cuando entro en la cancha me transformo. Fuera me gusta hacer bromas y joder con los amigos; me dicen que tengo cara de niño, pero dentro pienso como un futbolista de 30 años. Cuando me miro al espejo veo a un chico que a pesar de ser joven y estar en un gran club, tiene ganas de crecer y convertirse en un jugador importante. Es como si fuera un gato que se ve como un tigre, trato de tener confianza en mí mismo para crecer", reveló la joya cordobesa.

"CUANDO ME MIRO AL ESPEJO ES COMO SI FUERA UN GATO QUE SE VE COMO UN TIGRE"

Luego, recordó una ocasión muy especial de su infancia: "Una vez hicimos un fogón con los amigos, tendríamos cinco años, y todos tenían que decir qué querían ser de mayores. Yo dije que quería ser el mejor jugador del mundo, todos se reían, hasta yo mismo... Quedó ahí, pero lo tengo grabado en mi cabeza".

"Mi cabeza iba más rápido que la de ellos porque he tenido que vivir otras cosas: organizarte tus viajes, ir al banco. Eso te ayuda a madurar y a estar atento porque dependes de ti. Además, hay mucha gente que me admira, muchos niños que quieren ser como yo y tienes que tener una imagen intacta, ser humilde, ayudar a la gente. No puedes errar nunca. Está bien esto, pero a veces también me gustaría ser como mis amigos y no tener preocupaciones", admitió también.

¿Su modelo a seguir? "Quería parecerme a Riquelme. También a Ronaldinho, me gustaba muchísimo, veía todos sus partidos, me bajaba videos. Los argentinos no vamos muy de acuerdo con los brasileños en el fútbol, pero hay que reconocer a los buenos, como Ronaldinho y Neymar. También admiro mucho a Messi", contó. Y agregó: "Muchos aquí en la Juve me han dicho que tengo cosas de Tevez. Creo que por la forma de jugar y por ponerle garra".

"ACÁ EN JUVENTUS ME HAN DICHO QUE TENGO COSAS DE TEVEZ"

Por otro lado, recordó lo que fue su debut con la Selección: "Me acuerdo lo nervioso que estaba, cuando me llamó el seleccionador me sudaban las manos, lo soñaba desde que nací". En tanto, se mostró ajeno a la decisión de qué competencia lo tendrá como protagonista: "No sé todavía. Hay listas provisionales y no han hablado todavía con la Juve. Si pudiera elegir, las dos... La Copa América es la del Centenario, se juega en Estados Unidos, va a ser algo que no se va a repetir. Y los Juegos, para nosotros que tenemos menos de 23 años es una experiencia linda".