Fotorreportaje de la crisis: así están las heladeras de las familias venezolanas

Un reportero gráfico de Reuters ingresó a diversos hogares de Caracas para retratar cómo viven los ciudadanos frente a la inflación y la escasez de productos

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Los elevados precios y la escasez de productos en Venezuela perjudican a muchos ciudadanos a la hora de tener comida en sus mesas de forma regular y llevar una dieta equilibrada. Un reportero gráfico de la agencia de noticias británica Reuters obtuvo el permiso de diversas familias para entrar a sus hogares y retratarlas junto al contenido de sus heladeras.

"Ahora comer es un lujo, antes podíamos ganar algo de dinero y comprar ropa o algo. Ahora se va todo a la comida", se quejó Yaneidi Guzmán, que vive bajo el mismo techo que sus hijas, Esneidy Ramírez, Steffany Pérez y Fabiana Pérez.

En medio de una severa recesión y una economía disfuncional, las familias más pobres dicen que, a veces, se saltan comidas y dependen de alimentos de almidón. En otra imagen, Ricardo Méndez (segundo por la izquierda) junto a sus parientes y la comida que tiene en su casa, en Caracas. "Somos una familia grande y cada vez se nos hace más difícil comer", lamentó Méndez.

Esta fotografía muestra a Duglas Sánchez en su casa en Caracas. "Estamos comiendo mal, no comemos de forma equilibrada. Si almorzamos, no cenamos y si cenamos, no desayunamos", afirmó.

"Desayuno o una arepa o un tamal para poder comer, al menos, dos veces al día", dijo Mirella Rivero, que vive con su hijo José.

Antonio Márquez y su mujer, María. "Estamos comiendo menos, porque nos hemos apretado el cinturón. Antes teníamos la nevera llena", dijo Márquez.

Ciliberto Páez y su mujer, Consuelo Machado. "Antes, podías comprar cualquier cosa que necesitaras en el momento, ahora sólo puedes comprar lo que te venden", alertó Páez.

Alida González (la segunda por la derecha) junto a sus familiares. "Con el dinero que antes gastábamos en desayuno, almuerzo y cena, ahora sólo podemos comprar el desayuno. Y ni siquiera es muy bueno", explicó.

"Estamos comiendo mal. Por ejemplo, si tenemos harina de maíz, comemos arepas todo el día. Si tienes el dinero, no puedes encontrar la comida y, si la encuentras, no tienes suficiente dinero", contó Rosa Elaisa Landáez (al fondo de la imagen).