Boko Haram cuadruplicó el número de niños suicidas en África

El grupo terrorista aumentó significativamente en apenas un año el número de reclutas menores de edad; Unicef aclaró que los jóvenes no son agresores, sino "víctimas" del movimiento yihadista

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El grupo terrorista Boko Haram aumentó significativamente en apenas un año el número de niños suicidas. Según un reporte de Unicef, el registro de menores de edad utilizados por la organización extremista nigeriana pasó de cuatro a 44.

La agencia de la ONU para la infancia aclaró que los niños son "víctimas, no agresores", y detalló que el 75% son niñas.

"Al volverse comunes los ataques en los que participan niños, algunas comunidades comienzan a verlos como amenazas", explicó Manuel Fontaine, director de Unicef en África occidental.

"Esta sospecha hacia los niños puede tener consecuencias destructivas: ¿cómo puede reconstruirse una comunidad cuando expulsa a sus propias hermanas, hijas y madres?", agregó.

La agencia AP hizo referencia al caso de una mujer de unos 20 años que fue liberada por soldados en medio de un ataque a una aldea tomada por Boko Haram.

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El mes pasado, luego de reunirse con su familia en Maiduguri, la joven le confesó a su madre que había sido entrenada como atacante suicida. La madre, por temor a ser agredida por su propia hija, la entregó al Ejército, de acuerdo con una pariente que habló bajo condición de anonimato para proteger la identidad de su prima.

El número de niños que perpetraron ataques suicidas en Nigeria, Camerún, Chad y Níger se multiplicó por diez el año pasado, y la frecuencia de este tipo de ataques aumentó de 32 en 2014 a 151 en 2015, indicó Unicef. En 2015, Nigeria registró 89 de estos incidentes, Camerún 39, Chad 16 y Níger 7, decía el reporte.

Boko Haram ha atentado contra mezquitas, mercados y otros objetivos fáciles desde que una ofensiva militar multinacional los ha expulsado de una gran parte del territorio del país que mantuvieron hasta hace un año.

El grupo yihadista pretende crear un califato islámico en Nigeria, el productor de petróleo más grande de África, cuya población de 170 millones de personas está dividida en cantidad similar entre cristianos, mayoritariamente en el sur, y musulmanes en el norte.