Graves incidentes con manteros en Flores

Un nuevo enfrentamiento entre vendedores ambulantes y efectivos de la Policía Federal y la Metropolitana tuvo lugar este martes al mediodía en Flores. Las autoridades respondieron a los piedrazos con gas pimienta y balas de pintura para intentar frenar la instalación de puestos ilegales de mercadería sobre la avenida Avellaneda.

Las autoridades intervinieron porque entienden que es una competencia ilegal la de los vendedores callejeros ya que no pagan impuestos, entre otras cosas. Por esto, la decisión es llevar a una gran parte de los manteros, no a todos, a una zona del Once donde hay un galpón con aproximadamente 300 puestos donde puedan desarrollar su trabajo.

El violento episodio comenzó a las 11, luego de que unos 200 puesteros protestaran por el operativo de seguridad con un bloqueo de tránsito en Avellaneda, entre Cuenca y Campana, durante el cual insultaron a los comerciantes de la zona y obligaron a algunos a bajar las persianas.

Los vendedores comenzaron a golpear autos estacionados y cuando la policía intentó frenarlos, forcejearon con los agentes. Como consecuencia, un hombre fue detenido por daños y resistencia a la autoridad, y un policía herido.

También hubo un importante enfrentamiento con comerciantes senegaleses, que se multiplican día a día y no quieren dejar esa zona porque, según ellos, allí es donde venden sus productos. La policía los intentó correr y hubo un enfrentamiento muy duro con algunos de ellos que se han resistido con golpes de puño y empujones.

El operativo de seguridad había comenzado a las 4 de la madrugada de ayer con unos 500 efectivos de la Policía Federal y Metropolitana que bloquearon la instalación de manteros en Avellaneda, en Flores, mientras vendedores ambulantes realizaron protestas en rechazo a la acción contra la venta ilegal.

Los uniformados se desplegaron a lo largo de diez cuadras de la avenida Avellaneda, entre Condarco y Bahía Blanca, y se apostaron en el lugar para impedir la instalación de vendedores, quienes se manifestaron su malestar en dos oportunidades: a las 10 y a las 16.30. Entre otras cosas, exigen la apertura de diálogo con las autoridades el Gobierno porteño.

"No nos dieron una respuesta ni una solución, nos quieren mandar a un galpón de Once", se quejó Jorge López, referente de los puesteros informales respecto a la iniciativa del Gobierno de la Ciudad de mudar a todos los vendedores callejeros a predios cerrados para liberar las avenidas Avellaneda, Pueyrredón y Corrientes.

La Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba) registra al menos 1694 vendedores que exhiben mercadería en estantes y mantas en Once y unos 1602 instalados en Flores que podrían ser reubicados en un predio que funcionará en la intersección de Nazca y Avellaneda.