Mario Negri: "Hay un estallido en el Frente para la Victoria"

El titular del interbloque Cambiemos analizó en InfobaeTV lo que dejó la sesión de Diputados en la que se aprobó la derogación de las leyes cerrojo y de pago soberano

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La cara lo dice todo. El jefe del interbloque Cambiemos llega a los estudios de InfobaeTV luego de 36 horas consecutivas sin dormir. Se muestra sorprendido con el acompañamiento de la oposición para la aprobación del endeudamiento en la Cámara de Diputados: reconoce que no esperaba los 165 votos afirmativos.

En la entrevista, pronosticó una pronta salida del default, negó las versiones de sobornos a legisladores peronistas que acompañaron al oficialismo y advirtió sobre un "aislamiento" del bloque kirchnerista.

-¿Contento con la aprobación en Diputados?

-Sobriamente satisfecho, por la natureleza del tema. Son 14 años de default. Ya habíamos estado en 2001. Este es el único país del mundo que sale y vuelve a caer.

-Usted dijo que el kirchnerismo no es el Che Guevara, sino Isidoro Cañones.

-El gran error de ellos fue la ley Cerrojo. En el 2010 el gobierno venía mas o menos bien. Griesa parecía Mascherano, la Justicia jugaba a favor de la Argentina. Había reservas por más de USD 40.000 millones. Pero dejaron un 7% de bonistas afuera del canje. Griesa se paró en la ley Cerrojo para fallar en contra.

-Toda la oposición acompañó menos el kirchnerismo y la izquierda.

-La izquierda históricamente se niega a pagar. Pero el kirchnerismo se niega a reconocer que la deuda el último año fue parte de un relato. Se quedaron con eso. No hay un proceso de elaboración de la derrota electoral.

-El kirchnerismo dice que hubo coimas para el peronismo que acompañó.

-Romero tenía razón en darse por ofendido. Hay un estallido del Frente Para la Victoria. Hubo 165 votos favorables. A lo último, se sumaron 6 diputados de ellos.

-¿Eso es Banelco?

-No, eso es querer salir del Frente para la Victoria. El último año de Cristina explicando como docente costó USD 1500 millones. El kirchnerismo empezó bien pero terminó muy mal. Tienen que elaborar el duelo de la derrota. Se puede quebrar más el bloque. Hay que conciliar el interés de un gobernador por resolver su problema con la satisfacción ideológica de La Cámpora.

-¿Ahora no hay riesgo de nuevos litigios?

-Yo no pongo las manos en el fuego, pero tengo confianza. Es bajísimo el índice de litigiosidad. Además, está fortalecida la Argentina. Hubo enormes aportes de la oposición para extremar los recaudos y evitar el riesgo de nuevos litigios.

-¿Qué le preocupa del Gobierno? ¿Qué está haciendo mal?

-El Gobierno pensó que el empresario argentino iba a tener un comportamiento más amigable para bancar las crisis. Pero los que hacen negocios, hacen negocios. Nosotros no somos Moreno. No es la pistola en la mesa y 'vení que te aprieto'. Los problemas de precios no se resuelven a los gritos.

-Tampoco sin hacer nada

-Claro. Hay que tener un gesto fuerte. Porque nos metieron un 30% en diciembre y en enero, mientras estaban distraídos, te calzan otro 30%. Acá la prioridad es combatir la inflación. Aunque no la hayamos hecho nosotros.