Tras el guiño del juez Griesa, Alfonso Prat-Gay buscará acelerar más acuerdos con los holdouts

Desde Hacienda le dijeron a Infobae que la próxima tarea del equipo negociador será sumar más voluntades para "cerrar con la mayor cantidad de bonistas". "Queremos que todos ingresen a la oferta y terminar definitivamente con el default", señalaron

Compartir
Compartir articulo
 Reuters 162
Reuters 162

Las elogiosas palabras del juez Thomas Griesa en su escrito hacia el gobierno de Mauricio Macri dejó una sola lectura para el mercado financiero. Madura el desenlace de esta larga historia entre la Argentina y los holdouts. Se espera que el lunes tanto las acciones como los bonos locales suban fuertemente tras el guiño directo del juez a la postura argentina. Pero lejos del triunfalismo financiero, quizás por necesidad y no por voluntad, desde el Ministerio de Hacienda y Finanzas que comanda Alfonso Prat-Gay se admitió (sin bombos ni platillos) que se está cada vez más cerca de cerrar el tan mentado default de la deuda. "Ahora avanzaremos con la idea de arreglar con la totalidad de los acreedores. Queremos que todos ingresen a la oferta y se trabajará en los próximos días en ese sentido", le dijeron a Infobae fuentes oficiales.


El secretario de Finanzas, Luis Caputo, de regreso en Buenos Aires, seguramente emprenda vuelo otra vez hacia Nueva York para seguir con las tratativas con los fondos más intransigentes, o sea NML, Olifant y Aurelius entre otros. Los que ya dieron el sí son EM Limited, Montreux Partners, Los Angeles Capital, Cordoba Capital y Willton Capital. Entre estos suman más de USD 1.100 millones. Pero también sumaron voluntades entre otro tipo de inversores. Por ejemplo, los cerca de 50.000 bonistas italianos que demandaron ante el CIADI que terminaron arreglando por USD 1.350 millones, así como con un grupo de bonistas agrupados en una acción de clase colectiva, que figuran liderados por Henry Brecher. También el fondo Capital Markets Financial Services, dio su aval a la propuesta argentina como parte de los bonistas "me too" dentro del fallo pari passu, por un monto de USD 110 millones.


Desde Hacienda le reconocieron a este medio que las negociaciones con los acreedores más recalcitrantes, léase NML y Aurelius, siguieron incluso en medio de la batería de escritos que se lanzaron unos y otros por el tema del pari passu y el stay (ambos zanjados ya por Griesa al darle el OK al Gobierno). "Se seguirá negociando y esperamos que lleguemos a buen puerto", se limitaron a decir fuentes oficiales.


Queda por resolver cuestiones para nada menores. Por un lado, el poder de Mauricio Macri para que el Congreso le derogue la Ley Cerrojo y la del Pago Soberano. Además, raspar a la olla para pagarle a todos los que ingresen a la oferta oficial hasta el 29 de febrero. Esas dos condiciones impuso Griesa para reponer la medida cautelar que permita al Gobierno salir al mercado y conseguir dólares para, precisamente, pagarle a los acreedores. No significa que tiene que pagar el 29 de este mes, pero sí que para que automáticamente se levante la sentencia habrá que mostrar que se pagó a todos los que acepten hasta esa fecha. Si bien anoche desde Hacienda repetían que se pagará con lo surgido de una emisión de bonos, el Gobierno no puede emitir hasta que se restablezca la cautelar por el tema de los embargos. Muy posiblemente habrá que tomar dólares del Banco Central o idear una especie de préstamo sindicado que sirva para adelantar esos pagos.


En ese sentido, no sería tan atractiva la idea de que en estos 9 días corridos que quedan para que se cierre la fecha estipulada por Griesa, ingresen muchos más bonistas que engorden la factura. Por ahora, el guiño de Griesa es claro. La pelota pasó para el Congreso y las habilidades del equipo económico para conseguir los dólares que pide Griesa. Otra muestra de buena fe.