Existen miles de maneras de celebrar junto a la pareja. Desde ir a cenar a realizar ese regalo que el otro tanto está esperando. Sin embargo, hay maneras de vivir el Día de los Enamorados con actividades sencillas, donde lo material pasa a un segundo lugar.
Priorizar los momentos, no los objetos materiales. Una cena de a dos en casa a la luz de las velas o en el jardín puede convertirse en la mejor noche para la pareja. Optar por decoración casera de los utensilios a partir de la reutilización de telas o prendas que ya no se utilicen.
Reutilizar y reciclar. Frente a todo el marketing que se ofrece en el mercado para esta fecha, una opción con menor impacto para el ambiente (y para el bolsillo) es realizar la propia decoración del hogar a partir de la reutilización y el reciclaje de materiales en desuso. Corazones de papel colgados en broches, decorados en corcho o macetas a partir de botellas plásticas son algunas alternativas de una decoración más eficiente.
Cocinar casero y saludable. Cada vez son más los sitios de Internet que ofrecen opciones dulces y saludables a la vez. Buscar aquella receta que más identifique a la pareja o con algún ingrediente especial que le guste a la otra persona. Incluso, las alternativas veganas (sin ingredientes de origen animal) se convierten en una opción con menor impacto.
Conectarse con lo natural. Aprovechar la ocasión para salir de la ciudad y ponerse en contacto nuevamente con el verde, por más que sea a unos pocos kilómetros del hogar. Desconectarse de la festividad de las grandes urbes puede ser una alternativa de mayor privacidad y con un mayor vínculo reflexivo con lo natural.
Comprender lo importante. Lejos de ser una fecha donde importa el objeto material que se regale, no olvidar que lo más relevante es el amor que se le tenga a la otra persona. Y si en ese momento no se está en pareja, aprovechar la ocasión para abrazar a un padre, una madre, un abuelo, una abuela por el afecto y amor que uno le tiene. Será bien recibido.