Fueron tres ataques en menos de una semana. Una de sus víctimas fue un nene de 9 años integrante de una murga. De acuerdo a las denuncias, el modus operandi fue el mismo: en los tres casos, redujo por la fuerza a sus víctimas y las obligó a ir a un descampado cerca del hospital municipal de General Rodríguez, donde cometió los abusos sexuales. Los vecinos de la zona y médicos del hospital están con pánico de que vuelva a ocurrir ya que el violador serial está libre.
Por tal motivo, los habitantes de General Rodríguez salieron a la calle para exigir seguridad y el arresto inmediato del abusador. En todos los casos, el buscado sorprendió a sus víctimas con aparentes intenciones de robo y las llevó a un terreno baldío de los alrededores. No obstante, se montaron varios operativos frustrados.
Claudia, una de las vecinas, se mostró muy preocupada. En diálogo con CrónicaTV, sostuvo: "Es terrible lo que se está viviendo, estamos asustados". La mujer es allegada de una de las víctimas del violador y aseguró que "está en estado de shock". Sobre el atacante, dijo: "Es un tipo que las toma por atrás y les roba el celular y les devuelve el chip mientras les dice: 'Esto es un asalto nada más'".
La mujer contó que una de las víctimas relató "que (el violador) pone un auto en marcha y la llevó hasta una zona de montes que está detrás del Hospital Municipal". Posteriormente, "la asfixió hasta dejarla inconsciente y, cuando despertó, ella vio que tenía su ropa íntima baja, estaba ensangrentada y tenía semen en su pelo".
La joven hizo la denuncia en la comisaría acompañada de su familia. Su relato de los trágicos hechos coincidió con el de un nene de 9 años que también había sido abusado sexualmente de la misma manera. El menor fue sorprendido por el abusador mientras ensayaba en la calle para una murga, cerca del descampado en el que actúa el atacante. "El tipo aprovechó que el nene quedó medio apartado del grupo y se lo llevó a un lugar a escondidas para violarlo", reveló la vecina. En tanto, el abusador fue descripto como "un hombre morocho, de entre 35 y 40 años, de contextura grande".
Sandra (18), una de las víctimas del ataque, denunció que no recibió la adecuada atención médica en el hospital municipal donde le habrían dicho que los casos de abusos solo se atendían los jueves. Frente a eso, una de los directivos del hospital argumentó que el kit médico y las guardias están al servicio todos los días. "No hay un día específico de atención para los casos de abuso". Otra médica aseguró que la joven fue revisada por el cuerpo médico forense del lugar.